La Guardia Civil ha detenido a P.S.S.P., de 53 años y vecino de Vera (Almería) y que trabaja como repartidor de gas butano, después de que tuviera un accidente con el camión de reparto en el que llevaba 80 bombonas y fuera sometido a un test de alcoholemia, que arrojó una tasa seis veces superior a la permitida a los conductores de mercancías peligrosas.
El conductor, al que se acusa de un delito contra la seguridad vial, fue atendido por agentes de la Guardia Civil, quienes fueron avisados de que se había producido un accidente de circulación en la carretera A-352 entre las localidades almerienses de Cuevas del Almanzora y Garrucha.
Según indica la Comandancia en una nota, los agentes observaron que el camión dedicado al reparto de bombonas de butano para uso doméstico, había sufrido una salida de vía y había colisionado contra un muro cercano a la carretera. No obstante, el conductor resultó ileso y solo se produjeron daños materiales en el muro y en el vehículo.
Asimismo, parte de la carga que transportaba el camión había caído en la cuneta. En concreto, de las 80 bombonas de gas butano, 45 iban con su carga. De estas, 31 quedaron esparcidas por el suelo, si bien en ninguna de ellas se produjeron fugas ni desperfectos que las hicieran estallar.
Según los agentes, el hombre evidenciaba síntomas de conducir bajo la influencia de bebidas alcohólicas, por lo que se requirió la intervención de un Equipo de Atestados del Subsector de Tráfico de Almería para la realización de la prueba de alcoholemia.
Los resultado obtenidos confirmaron que, el conductor, presentaba una tasa de un miligramo de alcohol por litro de aire expirado, lo que supone sobrepasar en más de seis veces la máxima permitida para conductores profesionales, que es de 0,15 miligramos por litro de aire, con lo que se procedió a la detención del conductor. El detenido, junto con las diligencias, han sido entregadas en el Juzgado de Instrucción número 1 de Vera (Almería).
