Los hechos sucedieron pasadas las 20.00 horas, cuando el servicio de emergencias del 112 comunicó a la Policía Local que una persona había sido mordida por un perro pastor belga de color negro en las manos, antebrazo y tobillo, y que las lesiones sufridas por la víctima revestían gravedad.
Tras dar aviso al servicio de recogida de la Asociación Protectora de Animales El Refugio, los agentes locales colaboraron con los operarios del mismo en las tareas de captura del animal, sin que ésta pudiera llevarse a efecto a causa de la gran agresividad del perro, que acabó huyendo.
La alerta volvió a aparecer ayer martes, cuando una vecina de la calle Aragón se puso en contacto con la Jefatura de la Policía Local para informar de la aparición en la zona de un perro negro con actitud muy agresiva. En esta ocasión, el nuevo dispositivo conjunto de captura culminó con éxito.