El vicesecretario general del PSOE, José Blanco, pidió ayer “lealtad” al PP, ya que en un momento en el que el Gobierno está conformando con los populares un acuerdo contra el terrorismo, “utiliza cualquier resquicio para sembrar discordia”.
Blanco explicó a los medios tras participar en el acto de proclamación de Emilio Pérez Touriño como candidato socialista a la reelección como presidente de la Xunta de Galicia que el “compromiso” del Gobierno, y a lo que se dedica, con la ayuda de la cooperación internacional es a “terminar con la banda terrorista ETA”.
“A eso nos dedicamos. Sólo a eso y a ninguna otra cosa y las otras cosas se las dejamos para la imaginación de los dirigentes del PP que, ya que no tienen respuestas para la crisis y los problemas de los ciudadanos, todos los días están sembrando discordia y buscando problemas”, concluyó.
EL PP PIDE EXPULSAR A ANV
El vicesecretario general de Política Autonómica y Local del PP, Javier Arenas, pidió al gobierno que expulse a ANV de los ayuntamientos para enviar un mensaje claro a los terroristas de que no habrá una negociación futura y ha asegurado que esta medida es un paso decisivo en la derrota de ETA.
Arenas, quien ayer presidió una reunión con cargos públicos del PP de Sevilla, pidió al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que no contemple la salida de ANV de los ayuntamientos vascos y navarros como una cuestión de “cálculo electoral, sino como algo que se debe a la sociedad española y, en especial, a las víctimas del terrorismo”.
Según ha aseverado, la disolución de los consistorios gobernados por “los amigos de los terroristas” supondría un “paso decisivo en la derrota de ETA” y añadió que la legislación actual permite aplicar esta medida.
Además, Arenas entiende que el Gobierno de Rodríguez Zapatero no tiene ninguna credibilidad a la hora de decir que no volverá a negociar con la banda ETA, porque en la pasada legislatura lo negó mientras mantenía conversaciones con la banda terrorista, aseguró. Arenas instó al presidente del Gobierno a enviar un mensaje claro a los terroristas de que no habrá futuras negociaciones con la expulsión de ANV de las instituciones vascas y navarras.
