En la mágica ciudad de Vejer de la Frontera, la Navidad se vive de manera única gracias al emblemático Belén Viviente organizado por el Grupo Scout Edén 309. Este evento, que ha arraigado en el corazón de la población, se ha convertido en una tradición que trasciende el tiempo, conectando generaciones y preservando la esencia de la Navidad.

La coordinadora, Manoli Gil de Gomar, comparte que la inspiración detrás de este evento es "engrandecer la Navidad del pueblo y atraer visitantes en estas fechas". El objetivo va más allá de representar el nacimiento de Jesús; busca transformar Vejer en la antigua Judea, sumergiendo a los asistentes en una experiencia única.

¿Cómo surgió la idea de organizar el Belén Viviente en Vejer y qué significa para la población?
Manoli: La idea surgió hace 17 años, queríamos dar un toque diferente a la Navidad y ofrecer algo especial a nuestro pueblo. Para la población, el Belén Viviente se ha convertido en un símbolo de unidad y tradición, atrayendo a visitantes y creando una experiencia mágica para todas las edades.

Con más de 17 ediciones, el Belén Viviente ha evolucionado sin perder su esencia. Cada año, se introducen novedades para mantener fresca la experiencia. Escenas clave permanecen, pero la creatividad del grupo se despliega para ofrecer un recorrido que, aunque conocido, siempre sorprende.

¿Cómo ha evolucionado el Belén a lo largo de los años y cuáles son las novedades más emocionantes para este año?
Manoli: El Belén ha crecido en escenografía y participantes. Este año, estamos emocionados por agregar detalles especiales a las escenas y sorpresas que cautivarán a los asistentes. Siempre buscamos innovar sin perder la esencia que todos conocen y aman.

El proceso de preparación comienza en agosto, con reuniones meticulosas para planificar escenas y buscar figurantes. La estrecha colaboración con el Ayuntamiento y diversas asociaciones locales es esencial. Manoli destaca la importancia de mirar el tiempo con anticipación, asegurando que todo salga a la perfección.

¿Cuál es la parte más desafiante de la planificación y cómo garantizan que todo salga según lo planeado?
Manoli: La parte más desafiante es coordinar a todos los participantes y asegurarnos de que cada escena se desarrolle sin contratiempos. La anticipación y la colaboración con el Ayuntamiento y otras organizaciones nos permiten superar los desafíos y ofrecer un evento impecable.

Para los miembros del Grupo Scout Edén 309, el Belén Viviente es parte integral de su identidad. Desde los primeros meses del año, el grupo se embarca en la planificación. Los niños y niñas esperan con entusiasmo este evento, que se ha convertido en un pilar de su ronda solar.

¿Cómo se sienten los Scouts al ser parte activa del Belén Viviente y cómo contribuyen a la magia del evento?
Manoli: Los Scouts viven el Belén con gran emoción. Son los protagonistas de muchas escenas y aportan su entusiasmo y energía. Su participación es fundamental para transmitir la magia navideña y la historia que queremos compartir con nuestro pueblo.

El Belén Viviente está impregnado de anécdotas memorables, desde el traslado de animales hasta lágrimas de emoción de los Reyes Magos. La coordinadora destaca la alegría de los niños en el río y en el puente, capturando momentos que perduran en la memoria de Vejer.

¿Podrías compartir una anécdota que haya sido especialmente emotiva o divertida en alguna edición anterior?
Manoli: Recuerdo un año en el que los niños mayores fueron responsables de traer los animales. La diversión y el entusiasmo de los niños durante ese proceso fueron contagiosos. También, ver a los Reyes Magos interactuar con los más pequeños siempre es conmovedor.

Manoli describe su rol como coordinadora como una labor de gran responsabilidad y dedicación. La satisfacción personal al ver el evento culminado refleja el amor y compromiso que ella y todo el grupo depositan en esta tradición.

¿Qué significa para ti personalmente ser la coordinadora del Belén Viviente y cómo te sientes al ver el impacto en Vejer?
Manoli: Ser coordinadora es un honor y una responsabilidad que asumo con alegría. Ver el impacto positivo en el grupo, la sonrisa en los rostros de los asistentes y la conexión que crea entre las personas es una gratificación incomparable.

Los voluntarios desempeñan un papel vital en la ejecución del evento, desde el montaje hasta el desmontaje. Figurantes, padres y colaboradores locales se unen al equipo para dar vida a este espectáculo que ilumina las noches navideñas de Vejer.

¿Cómo pueden otros interesados unirse como voluntarios y cuál es su papel en el éxito del Belén Viviente?
Manoli: Cualquier persona interesada puede unirse como voluntario ayudando en el montaje, siendo figurante o participando en el desmontaje. Su papel es crucial para garantizar que cada detalle se cuide y que el evento sea todo un éxito.

Aunque el Belén no es comunitario en el sentido estricto, la colaboración con diversas entidades locales, como la agrupación parroquial Angustias de Vejer y el Club Motero las 22 curvas, demuestra cómo la población se une para preservar esta tradición.

¿Cómo se coordinan con otras organizaciones locales y entidades para hacer del Belén Viviente un evento que involucre a todos?
Manoli: Colaboramos estrechamente con asociaciones locales y entidades que aportan su granito de arena. La Agrupación Parroquial, el Club motero, y otras organizaciones son fundamentales para hacer del Belén Viviente un evento que realmente involucre a todo Vejer.

Manoli destaca la importancia de preservar las tradiciones locales, considerándolas parte fundamental de la historia. En Vejer, con su marco incomparable, el Belén Viviente se erige como un faro que guía a la comunidad a través de las raíces culturales.

¿Por qué es importante preservar las tradiciones locales y cómo el Belén Viviente contribuye a este propósito en Vejer?
Manoli: Las tradiciones locales son nuestra identidad y memoria. El Belén Viviente es una manera de conectar con nuestras raíces, transmitir nuestra historia y unir a la comunidad en torno a algo especial. Contribuye activamente a la preservación de lo que somos.

A través del Belén Viviente, el Grupo Scout Edén 309 busca transmitir valores scouts como respeto, compañerismo, solidaridad y servicio a los ciudadanos. Estos valores se entrelazan con la magia navideña, dejando una huella duradera en el corazón de Vejer.

¿Cómo se reflejan los valores scouts en la organización y ejecución del Belén Viviente?
Manoli: Los valores scouts son la base de nuestro grupo y se reflejan en cada aspecto del Belén Viviente. Desde el respeto y la solidaridad entre los participantes hasta el servicio a la comunidad que ofrecemos, buscamos transmitir estos valores en cada escena y en cada sonrisa.

En cada representación, el Belén Viviente no solo narra la historia de la Navidad, sino que también teje una narrativa de unidad, amor y tradición que ilumina el espíritu de Vejer de la Frontera.