El Valencia ha logrado ganar los cuatro partidos que ha jugado en la primera pretemporada de Rubén Baraja, que, llegado en el tramo final del pasado curso y renovado tras lograr la permanencia, intenta imponer su estilo con solo dos fichajes, Cenk Ozkacar y Pepelu, una plantilla corta y un numeroso grupo de jugadores del filial.

Nottingham Forest (1-0), Spartak Trnava (0-1), St Gallen (1-3) y Alavés (2-0), han sido las cuatro victorias de los valencianistas, que solo han recibido un gol en una pretemporada discurrida en Valencia, Eslovaquia y Suiza.

Pese a las victorias, los partidos reflejan la falta de pegada del equipo, que no ha reforzado su parcela ofensiva después de la marcha de los cedidos Samu Lino y Justin Kluivert o de la reciente salida de Edinson Cavani, además de las pocas probabilidades de continuidad de jugadores como Yunus Musah, Samu Castillejo o Marcos André.

En el partido contra el Alavés, Baraja probó en el centro del campo a Mouctar Diakhaby ante la falta de refuerzos también en la medular y en la pretemporada ha dejado ver su idea de implantar una presión alta y una salida de balón por las bandas para no correr tantos riegos.

Tras el partido, Hugo Duro explicó que “la pretemporada está para coger la forma, poquito a poquito coger conceptos con el míster que el año pasado llegó, pero con la temporada empezada, y para estar preparados para el Sevilla”.

“Estuvimos con él (Baraja) el año pasado, pero ha introducido pequeños detalles que la temporada pasada no nos dio tiempo por la situación del equipo, pero el grupo se está adaptando rápido y bien. A muerte con el míster y todos juntos”, finalizó. 

Al Valencia solo le queda un partido de pretemporada antes de empezar LaLiga, pero será una prueba de fuego al tratarse del rival de mayor nivel al enfrentarse al Aston Villa de Unai Emery en Mestalla en el Trofeo Naranja.