El título de este artículo hace un guiño a la obra de Fernando Fernán Gómez y, aunque parezca una evidencia, las piscinas se disfrutan principalmente en verano. Pero el dilema se presenta cuando hay que elegir el tipo de piscina. ¿Cuánto cuesta instalar una piscina? ¿De qué tamaño? ¿De qué tipo?
Disponer de una casa con espacio para piscina es un bien al alcance de pocos, especialmente en las ciudades. Pero, aún teniendo la posibilidad, a muchos les cuesta decidirse porque piensan que instalar una piscina es un lujo muy caro.
Bañarse en la piscina es uno de los métodos más eficaces para combatir el calor sofocante del verano. Y cada vez son más habituales las casas particulares con piscina propia, porque hay opciones más económicas que hace unos años. Por ejemplo, muchos prefieren piscinas de poliéster rectangulares por sus múltiples ventajas.
Ventajas de las piscinas de poliéster
Una de las principales ventajas de las piscinas de poliéster frente a las de fabricación tradicional es que su instalación es más rápida y sencilla. No requiere tanta mano de obra ni materiales como una piscina de obra, lo que también reduce los costes.
Al ser piscinas de una sola pieza, se reducen los costes de mantenimiento. Las tareas de mantenimiento se centran principalmente en la limpieza y depuración del agua. No es tan habitual tener fugas en este tipo de piscinas porque no tienen juntas. Pero en caso de tenerlas, su reparación es más sencilla , rápida y limpia, porque se basa en aplicar mallas y resinas en las zonas afectadas.
El precio de una piscina de fibra es más reducido en comparación con una de obra de características similares. Hay otros costes en los que no incurre una piscina tradicional como, por ejemplo, el transporte de la piscina. Pero, a final de cuentas, las piscinas prefabricadas suelen ser un 15 o 20% más baratas que las de obra.
¿Cuánto cuesta una piscina de poliéster?
Esta es una buena pregunta, con una respuesta muy amplia. Los precios pueden variar desde unos cientos hasta unos miles de euros y todo depende de varios factores.
El tamaño influye mucho en el precio. Una piscina de fibra muy grande es más difícil de fabricar y transportar, por lo cual, aumenta el coste. Si la piscina es muy grande, es posible que se precise de una solera de hormigón para que aguante bien la presión del peso.
Las piscinas de poliéster tienen formas muy estándar, pero si se elige una a medida se incrementará el precio. También se ha de tener en cuenta el refuerzo de los laterales y los acabados exteriores, así como el tipo de bomba de agua que se instale.
Tener una piscina en casa ya no es un lujo, como se pensaba antes. Ahora, las piscinas de poliéster ponen al alcance una posibilidad que solo era para unos pocos. Las ventajas en la instalación, el mantenimiento y el precio hacen que sea una de las mejores elecciones para afrontar el calor de este verano.
Fuente: https://www.piscinesmondepra.com/piscinas-de-poliester/
