El Ayuntamiento de Sevilla y la concesionaria del proyecto fallido para la recuperación del Mercado de la Puerta de la Carne han llegado a un acuerdo para liquidar el contrato en virtud del cual la empresa recibirá más de un millón de euros (1.046.730 euros) por la rescisión del mismo.
Así lo ha confirmado este jueves el delegado de Hábitat Urbano y Cohesión Social, el socialista Juan Manuel Flores, durante el debate para su aprobación de la moción presentada en el Pleno por el grupo municipal del PP, que finalmente ha salido adelante con los votos de todos los grupos políticos excepto Adelante Sevilla (IU-Podemos).
Flores ha anunciado que la empresa y el Ayuntamiento están de acuerdo en la cantidad fijada para la liquidación que, "siguiendo las indicaciones de los altos funcionarios de este Ayuntamiento, se ratificará", momento a partir del cual el Consistorio tiene previsto realizar obras de mantenimiento en el edificio "a la mayor brevedad posible".
Una vez cerrado este "proceso bastante complejo" y que se remonta a 2014, cuando el gobierno municipal de Juan Ignacio Zoido (PP) firmó el contrato que ahora se rescinde, el delegado de Hábitat Urbano ha ratificado la "intención" del Consistorio de "poner en valor el edificio" con la licitación de un proyecto que "dé respuesta" a las necesidades "culturales y de ocio" de la ciudad. "El proyecto se desatascará. Lo conseguiremos y será una realidad", ha apostillado Flores.
El concejal del PP José Luis García ha criticado que la situación del Mercado de la Puerta de la Carne es fruto de la "ineficacia" de Antonio Muñoz, primero como delegado responsable de las políticas urbanísticas, y, ahora, como alcalde de la ciudad. En su turno de réplica, el delegado Juan Manuel Flores le ha recordado que "la génesis del problema está en un contrato que firmaron ustedes", en alusión al gobierno municipal de Zoido.
Por parte de Adelante Sevilla, su portavoz, Daniel González Rojas, ha pedido conocer si el nuevo proyecto que se licitará "afectará" al arbolado y "privatizará" la plaza trasera del Mercado, como, a su juicio, ocurría con el proyecto cuyo contrato está ya en su fase de liquidación final.
La actuación proyectada por la Unión Temporal de Empresas (UTE) liderada por Inversport 2010 estaba valorada inicialmente en alrededor de 7,5 millones de euros con los que restaurar por completo el recinto y conformar un nuevo espacio con 24 puestos de hostelería en la planta baja, usos comerciales y de restauración en la primera planta, un mirador en las cubiertas y un sótano dedicado a actividades culturales, toda vez que la UTE gozaría de la explotación comercial del recinto.
No obstante, después de que a mediados de marzo de 2017 arrancasen las excavaciones arqueológicas de carácter preventivo y fuesen desenterrados restos del antiguo matadero municipal, encargado en 1489 por los Reyes Católicos y demolido en 1914, el Ayuntamiento, merced a las directrices de la Consejería de Cultura, pedía a la UTE una modificación del proyecto original para "integrar" en el mismo los restos rescatados, según un documento municipal recogido por Europa Press.
En marzo de 2019, el Ayuntamiento solicitaba a la UTE otra reforma del proyecto, bajo la premisa de que los nuevos estudios geotécnicos realizados en 2018 habrían revelado que la cota del nivel freático está "por encima de la profundidad estimada" en un principio, encontrándose dicho nivel en unos 4,10 metros de profundidad en lugar de entre 7,10 y ocho metros bajo rasante como inicialmente se preveía.
Tal extremo incidía en el sótano que incluía el proyecto, pieza a su vez estratégica para la actuación porque dicho espacio estaba destinado a acoger diferentes equipamientos e instalaciones del recinto, dada la imposibilidad de ubicar tales elementos en la cubierta del edificio al gozar el mismo de protección.
La UTE promotora del proyecto, de su lado, señalaba que ya estaba "terminando" el nuevo proyecto técnico, que groso modo incorporaría novedades respecto al sótano, al incluir la construcción del mismo unas pantallas de hormigón armado que conformasen un único recinto estanco al objeto de salvar la incidencia relacionada con el nivel freático, y la musealización de los vestigios arqueológicos. Tales modificaciones elevaban el coste calculado de las obras hasta aproximadamente diez millones de euros.
Finalmente, el Ayuntamiento anunciaba el pasado mes de septiembre de 2020 que ambas partes habían acordado la rescisión de la concesión, dada la "imposibilidad acreditada" por la empresa adjudicataria de cumplir con los términos de la licitación de 2014 debido al "desequilibrio económico generado por las necesidades técnicas sobrevenidas por la detección de un nivel freático más elevado de lo previsto y la necesaria incorporación de los restos arqueológicos".
La UTE, en ese sentido, esgrimía que el coste derivado de la nueva modificación del proyecto excedería las limitaciones de la propia Ley de Contratos del Sector Público, "alterando las condiciones esenciales" de la concesión. Tal extremo, según el Ayuntamiento, habría quedado debidamente acreditado.
La idea del Ayuntamiento, así, es licitar una nueva concesión que se ajuste a las necesidades técnicas y a los criterios de intervención arqueológica, que plantee un modelo de gestión y de uso viable y que incorpore, además, un plan de evaluación ambiental del entorno del mercado de Puerta de la Carne.