Las hermandades, a su paso por la Plaza de la Iglesia desde la reforma de la plaza por el tranvía, hace que desde 2011, las hermandades tengan que bajar la plaza junto a la pared de edificios del Hotel Salymar y después de bordear el monumento y pasar entre árboles, salir a la calle Real serpenteando entre vallas. Una situación que se vuelve de gran riesgo para las cofradías, cuando llegan tarde a Carrera Oficial y dependiendo del paso. De momento son los capataces los que han alzado la voz para solucionar este problema, pero hay más.
Preocupa la seguridad de las viviendas, comercio y hotel de ese tramo de acerado en el caso de que ocurra algún accidente con una hermandad pasando por ahí y con público que puede bloquear el acceso o salida de iendas, viviendas o del hotel.
Para solucionar los problemas de seguridad de los vecinos y establecimiento hotelero, además de facilitar el acceso de las hermandades a la calle Real, se quiere que se restituya la rampapor el centro de la Plaza de la Iglesia, ya sea de madera o metálica.
La colocación de toldos para terrazas, en la Plaza de la Iglesia imposibilitó que en 2011 las cofradías pudieran pasar por el centro y fueron derivadas al extremo de la plaza. La desaparición del establecimiento de Cañas y Adobo ha liberado gran parte de esa plaza, que ahora permite el paso de las cofradías por donde siempre han discurrido en su acceso a la Plaza de la Iglesia.
No sólo es mayor espacio y seguridad para las hermandades que bajan la plaza y también la que este año la ha subido, como es Vera-Cruz, sino mayor seguridad para el hotel, las tiendas, la entidad financiera y los vecinos, así como mayor espacio para las miles de personas que salen a la calle en Semana Santa.
Ahora, quedará por ver si la procesión del Corpus Christi puede ser la primera en pasar por la nueva rampa o habrá que esperar.