El emir de Catar, Tamim bin Hamad al Thani, anunció hoy una ayuda de 60 millones de dólares para apoyar los programas de desarrollo en los países con menos recursos, e instó a los Estados avanzados a "seguir el ejemplo", mientras pidió un "plan global de desarrollo humano" para erradicar la pobreza.
"Anuncio una contribución total de 60 millones de dólares (...) para aplicar las actividades del Programa de Trabajo de Doha para ayudar a los países menos desarrollados (...) pido a nuestros socios que sigan el ejemplo como parte de nuestro deber humanitario", dijo Al Thani en la inauguración de la quinta edición de la conferencia de los Países Menos Desarrollados (LDC, por sus siglas en inglés) en la capital catarí.
En su discurso, el emir consideró "responsabilidad de todos" hacer frente a los problemas de la crisis alimentaria, el cambio climático, la crisis energética y la deuda exterior de los menos desarrollados.
"Los países ricos y avanzados deben contribuir más para ayudar a los menos desarrollados a superar los retos (...) no es un favor, sino una responsabilidad", aseveró Al Thani, y pidió, por otro lado, a los Estados con menos recursos que adopten "programas de desarrollo racionales".
"No se puede lograr la paz ni el desarrollo mientras continúen los conflictos armados en algunos de los países menos desarrollados (...) la crisis de la deuda también ha obstaculizado la marcha del desarrollo y requiere una solución más completo", dijo.
Por otro lado, pidió una mayor solidaridad con Turquía y "con el pueblo sirio hermano" para poder superar las consecuencias del terremoto del pasado 6 de febrero, mientras consideró "inaceptable aprovechar la tragedia humana para lograr objetivos políticos", en alusión al Gobierno del presidente sirio, Bachar al Asad.
La conferencia de Doha fue inaugurada con la presencia del secretario general de la ONU, António Guterres, con el objetivo de asegurar ayudas económicas para luchar contra las diferentes adversidades mundiales.
Presidentes y gobernantes de 33 países africanos y 12 de Asia-Pacífico y Haití en el Caribe se reúnen cinco décadas después de que la ONU creara la categoría de LDC con el objetivo de reducir la desigualdad y la brecha de la riqueza.
Durante los cinco días que durará la conferencia, los líderes mundiales se reunirán con el sector privado, la sociedad civil, los parlamentarios y los jóvenes para promover nuevas ideas, conseguir nuevas promesas de apoyo e impulsar el cumplimiento de los compromisos acordados, a través del Programa de Acción de Doha, adoptado en 2022.