Cumplir cien años, no puede haber una fecha más esperada, por eso, hay pandemia y hay virus, pero el espíritu cofrade sigue en pie y se robustece ante las dificultades. Así las cosas, Málaga vivió el fin de semana un Vía Crucis singular en la Catedral, recogido, tan solemne; y ayer mismo, daba visibilidad a la imagen que va a representar los actos de la pasión de este complicar 2021.
Una imagen personal, sencilla, pero profunda, y tan simbólica. Un Cristo descendido de la cruz sujeto por un sudario de Andrés Mérida que vierte su sangre sobre una muy malagueña biznaga. “El azul simboliza a Málaga y el rojo hace alusión a la pasión. Creo que la biznaga nunca se representó en un cartel de la Semana Santa de nuestra ciudad”, enfatizó el autor durante el acto llevado a cabo en el Auditorio Edgard Neville de la Diputación Provincial, un cartel, presentado por Manolo Castillo, director de Diario Sur, y un acto en el que el presidente de la Agrupación, Pablo Atencia, puso el acento en que “estos actos que estamos haciendo nos reconfortan y nos permiten compartir momentos emocionantes y profundo”, que no es poco, cuando la tristeza de no poder vivir una Cuaresma y una semana de Pasión al uso, debe suplirse con coraje cofrade.
Otras declaraciones destacadas fueron las de Sergio Corral, director general de la Fundación Unicaja, que señaló que “concurrimos aquí con un sentimiento abiertamente agridulce, en el que la alegría habitual por conmemorar este acto, que forma parte del ritual de inicio de la Semana Santa, se ve ensombrecida por las circunstancias globales y por la supresión de los recorridos procesionales de este año”.
Por su parte, el presidente del ente supramunicipal, Francisco Salado recalcaba que la Semana Santa es un evento “patrimonio de su ciudad y de su provincia, pero es, ante todo, algo universal”, y subraya el cartel de 2021 y recuerda la importancia de este evento para los oficios artesanos y empleos ligados a esta tradición.