Los últimos acontecimientos han puesto a Leandro Castelló en la actualidad informativa. Sus acusaciones al PSOE de persecución política y el reciente episodio que protagonizó con González Cabaña en el Pleno de Diputación se unen a una vieja polémica que se inició en su blog personal: El limón amargo.
—¿Cuando comienza la persecución que denuncia?
—Me presento como candidato a la Alcaldía, y cuando vuelvo a mi puesto de trabajo, después de las elecciones, empiezo a ver cómo las cosas han cambiado. Ya no formo parte de ningún equipo. A los dos años, tiene que ser una compañera la que me pide ayuda porque está desbordada de trabajo. En esos dos años me limito a llegar a las ocho de la mañana, a sentarme delante de un ordenador sin conexión a internet y sin teléfono, y a no hacer básicamente nada. En enero de 2009 empieza la persecución, que es cuando me retiran el ordenador y el teléfono, me ordenan no salir a la calle o dar explicaciones de a dónde voy.
—¿Está seguro que es un tema político y no laboral?
—Evidentemente. Yo tengo la seguridad porque yo jamás he tenido problemas en 16 años con nadie, ni con ningún compañero ni con ningún jefe. Y cuando entro en política activa empiezo a tener problemas de prohibirme reunirme con asociaciones de vecinos y ciudadanos. Me quitan un programa de inserción porque tenía que estar en contacto con jóvenes que eran futuros votantes. Recomendaron al responsable de UGT en mi delegación que no desayunara conmigo. Al policía que estaba en la sede, que era militante andalucista y que desayunaba conmigo, lo quitaron de allí y lo mandaron a otra sede para que no tuviéramos contacto. Todo ha sido tema político.
—Usted también denuncia amenazas...
—Amenazas de todo tipo. Comenzaron el pasado verano. La primera coincide con el día que estaba naciendo mi segundo hijo, cuando me llegó un mensaje a las 5.20 de la madrugada que decía: “no entiendo cómo has podido ser tan tonto, tan ingenuo y tan pobretón. Meterte con todo el pueblo y con tus propios compañeros de esa manera tan bajuna. ¿No sabes que tienes una familia a tu cargo?”. Al hilo de ese, llegaron amenazas de muerte a mi casa. “Muerte al limón”. “Te vamos a matar”. A las cinco de la madrugada. Tuve que cambiar de número de móvil. También amenazas en correos electrónicos, algunas tan torpes que salía la dirección y podían ser localizados, y están denunciados. Y por cartas anónimas, en el trabajo y en mi domicilio.
—¿Quién le amenaza?
—Está denunciado y están localizándose muchos correos. Son gente cercana al Ayuntamiento de Algeciras y cercana a la Delegación de Personal. En concreto una persona del Consistorio me amenazó de muerte por teléfono directamente. “Ten cuidado, que los policías llevan pistolas y las pueden utilizar”. Fue una llamada por septiembre, y es la única conversación que he tenido con él por teléfono.
—¿Ha contactado alguna vez con el equipo de Gobierno para aclarar el tema?
—Nunca. Esto se hubiera solucionado todo muy rápido si en el momento en que ellos me acusan de estar detrás del Limón Amargo, me hubieran sentado en una mesa, hubiéramos hablado del tema y se hubiera aclarado todo en cinco minutos. Pero creo que la intención no era esa. Fue buscar y encontrar quién estaba detrás de esa página para, por amenazas y presiones, eliminar la página por completo. La página derivó en una página bastante crítica con el equipo de Gobierno, y la idea era eliminarla. Intentaron romperla por la parte más débil, que era yo porque estaba dentro del Ayuntamiento. Amenazas de despido, de convocar plazas y de echarme a la calle como así ha sido al final, porque ya es un hecho que estoy a las puertas de quedarme en el paro.
—¿Su partido sí que tuvo un contacto con el equipo de Gobierno?
—El PSOE le pide al PA que me expulsen del partido por las responsabilidaes en el blog. El partido dice que no, que es un tema particular de un militante en su tiempo libre. Al hilo de esta negativa, ya se radicaliza todavía más la postura y se convoca una plaza de funcionario de interino, pero en vez de hacerla como animador sociocultural, que es lo que he venido haciendo durante 16 años, y es la plaza que ocupo, la convocan de operario, y me quedo sin puntuación ni por antigüedad, ni por experiencia ni por la cualificación de los cursos. Eso fue lo que los compañeros del partido fueron a hablar con el PSOE, que estaban creando un peligrosísimo precedente. Fue una reunión donde no se llegó a ningún acuerdo y a día de hoy estoy con el examen suspendido, como era lógico. Y estoy a la espera de que me comuniquen que estoy en la calle en cualquier momento.
—El PA denunció que eran varios los militantes afectados...
—Sí. Ha habido otros compañeros que están en situaciones muy parecidas, pero no han llegado al extremo de mi caso. Pero sí hay compañeros que trabajan en empresas públicas del Ayuntamiento que están sufriendo y han sufrido cambios de delegaciones, de sus funciones, que no se corresponden con las que venían desarrollando, o retirados para mandarlos a otros puestos sin pasar comisiones paritarias. A uno de ellos se le ha llegado a insultar por darse de baja de UGT.
Limón Amargo
—Todo comienza con el blog El Limón Amargo...
—En Algeciras existe un foro de asociaciones culturales contrario a Inmaculada Nieto, que crea el blog, y yo colaboro con ellos. El correo de recuperación de las claves es el mío. El blog empieza a apoyar el catastrazo y se le empezó a dar vida. Yo entré de forma más asidua y vi el boom que tenía. Escribí varios artículos que se los remitía a los administradores de entonces y ellos los publicaban. Todos tenía que ver con cosas del PA. Escribí siete de los más de 100 que se escribieron al principio. A partir de ahí, se produce una denuncia contra el blog, sobre todo por comentarios que se metían contra miembros del equipo de Gobierno. Ellos argumentan que se está insultando a los funcionarios, cosas que yo no entiendo y se lo dije al juez: “cómo se puede denunciar a un blog y no denuncia al resto de medios de comunicación, que tiene mucho más tráfico de visitas y tienen los mismos comentarios que tenía el blog”. La gente encontró un sitio donde poder expresar sus opiniones, y encima era leído por mucha gente. Había una corriente de opinión en la calle muy contraria al equipo de Gobierno.
—¿Y cómo está el proceso?
—Espero salir indemne. Ellos no se han presentado a ninguna de las dos vistas que ha habido todavía. Isabel Beneroso y Diego Sánchez Rull, que fueron los dos que denunciaron.
—Y ahora, ¿qué sucede con el blog?
—En cuanto esto salta, el blog para de publicar en agosto. Yo recibo la primera amenaza el 18 de agosto, aunque la constancia de la denuncia la recibo en septiembre. El que metía toda la información se va fuera de Algeciras y tiene que dejar de administrarlo. Yo hablo con los otros dos y decido que, dada la denuncia, sea yo el que filtre y el que publique. Cambio las claves. Lo tengo todo paralizado pero, viendo que esto no se arregla y cuando se confirma que me convocan la plaza y me voy a la calle, pongo el blog en marcha pero ya yo solo, y ahora con toda la intención del mundo. Ahora voy a decir lo que nunca he podido decir, porque estaba en el Ayuntamiento trabajando y yo siempre he sido muy respetuoso con Asuntos Sociales, que es mi delegación, y con compañeros que, antes que la crítica, prefiero preguntarles. Pero ahora el Limón Amargo va a publicar lo que sabe, y con las pruebas que tiene y va a tirar de la manta. La manta es muy grande, y hace falta mucha gente para tirar. Pero yo ya he empezado y ya hay gente que se está uniendo. Espero que poco a poco se destape todo lo que hay, porque hay mucho.
—¿Qué hay que destapar?
—El problema del Ayuntamiento es un problema estructural. No puntual, ni de una sola delegación. Yo creo que es el único ayuntamiento de España donde el jefe de personal no está titulado. Y tiene, dentro del Ayuntamiento, a su mujer, a su hija, a su cuñado, a su cuñada, a su sobrino, a la mujer de su sobrino... Hay una familia entera metida. Esto no pasa en ningún ayuntamiento de España. Que la Delegación de Personal sea la patronal y el sindicato a la vez. Es decir, el comité de empresa y los jefes de personal son los mismos. Eso no ocurre en ningún sitio de España. Que el PSOE e IU, en la oposición pongan al PA de chorizos, que nos iban a meter en el juzgado e iban a meter a Pepe Ortega y a Patricio en la cárcel. Y luego cogen la Alcaldía y no hay una denuncia puesta en el juzgado, no se ha destapado ni un solo papel. Nadie cuenta nada ni le dice a los ciudadanos aquí hay este chanchullo o este. IU no habla, no sabe nada. El PSOE, lo que antes era ilegal en San Bernabé, ahora es legal. De Somixur hace dos años que no sale un artículo en el periódico. Todo eso tiene un porqué o tiene que tenerlo. Y hay que descubrirlo. Y ha llegado el momento. Alguien tiene que decir algo y por qué están pasando esas cosas. Yo antes leía novelas históricas, ahora me leo presupuestos del Ayuntamiento. Y voy partida por partida, y partida sospechosa que tenga, partida que voy con un escrito al Ayuntamiento pidiéndole información. Y si me lo quiere dar, bien, y si no voy a Fiscalía.
—¿Podría caer de la manta su propio partido?
—Por supuesto. Si hay alguna irregularidad en lo que se nos acusa, como San Bernabé, La Escalinata, Somixur, Arroz, el que lo haya hecho que lo pague. Ese lo tiene que pagar. Y porque sea de mi partido no lo voy a defender a muerte. Lo defenderé mientras no se demuestre que es culpable.
—¿Usted emprende esta lucha en solitario?
—En el blog hay mucha gente colaborando. A título personal busco irregularidades. La intención no es hacer daño. A mi me han puteado cuatro personas: Sánchez Rull, Beneroso, Michel y Bernardo Palenciano. Pero yo no tengo personalmente con ellos nada. Políticamente todo. Si mi partido llega algún día a entrar en el Ayuntamiento, voy a ser el primero que Urbanismo lo va a poner patas arriba, y voy a sacar hasta el último papel que haya que demuestre o la inocencia o la culpabilidad de algunos. Y lo mismo en la Delegación de Personal. No puede estar sin organigrama. Hay gente que no va ni a trabajar.
Elecciones
—¿Cómo ve al PA estas elecciones?
—Tenemos la misma línea que en 2005. Muy crítica con el equipo de Gobierno, que prometió muchas cosas y no ha cumplido prácticamente ninguna. Una de las características principales de Patricio es que se peleaba con quien fuera para que Algeciras tuviera algo. Desde que se fue, se han perdido tres carreras universitarias. Hemos aprendido y tenemos la experiencia que nos da Hermenegildo, que quizás es el mejor gestor que ha tenido Algeciras muchos años en Diputación. Estamos preparados para entrar y para gobernar de verdad esta situación.
—¿Cuáles fueron los errores que se cometieron en su día?
—Si hemos pasado de 12 a 0 concejales es porque se han cometido errores. El primero es la confección de la lista de 2003, porque se incluyó a Enrique Cristelli y Encarna Gallego y se desplazó a gente joven del partido. Patricio González, para mí, ha sido el mejor alcalde de Algeciras con diferencia. Y el tiempo y la gestión del de ahora lo está haciendo todavía mejor. Pero cometió errores, como creerse que era el único que podía salvar a la ciudad sin contar con la gente que tenía a su alrededor. En San Bernabé, la Escalinata, Somixur, El Corte Inglés, Urbaser también metimos la pata hasta el fondo.
Futuro incierto
El papel que jugará Leandro Castelló en el PA de cara a las próximas elecciones es una incógnita. “A mi me gustaría ir en las listas. Pero viendo lo que me ha costado ir de cabeza lista, mi puesto de trabajo prácticamente... pero eso lo tendrá que sopesar el partido, si mi imagen pública se deteriora o se refuerza por todo esto”.
Sobre la posibilidad de convertirse en la llave del PP, Castelló sentencia: “de eso se hablaba también hace cuatro años y nos quedamos en la calle. Ni nos planteamos ser llave con el PP ni ningún pacto de Gobierno. Lo que sí es que jamás me sentaría con el PSOE ni a tomar café, y te lo digo como Leandro Castelló. Y lo mismo lo diré dentro de mi partido. Nos planteamos entrar en el Ayuntamiento de nuevo, y una vez dentro plantearemos si equipo de Gobierno u oposición. No nos vamos a prostituir por un sillón, por dos sueldos o por un cargo. Es un programa que hay que cumplirlo”. Sobre la posibilidad de renunciar, el andalucista es rotundo: “No. Nunca. Me lo han recomendado y pedido, pero no me lo he planteado nunca. Porque yo siempre he creído que esto tiene arreglo, Lo único que hace falta es que te dejen demostrarlo. Y si, cuando estás ahí, no puedes hacerlo, entonces te vas. Pero sin intentarlo, no”.
“No me gustaría que mis hijos crecieran en la ciudad que hay ahora. Una ciudad donde la gente está asustada, amenazada. Tú no puedes hablar. Si sacas una pancarta en un Pleno y eres del PA no puedes pero si eres del PSOE sí puedes. No me gusta esta historia. Me gustaría una Algeciras más dinámica, más joven, más abierta, más bonita… Yo creo que eso hay que hacerlo trabajando desde la política. La política, a pesar de que está muy desprestigiada, es el único camino que hay para cambiar la sociedad. Y la gente que está limpia, como yo, que no he tenido ninguna gestión, tenemos que intentarlo, y quedarnos en el camino en todo caso”.