El Ayuntamiento de Huelva iniciará este miércoles la intervención en el Cementerio Municipal de La Soledad para recuperar los restos de Pedro Masera Polo, anarquista fusilado y arrojado a una fosa común del camposanto onubense en 1938 y reclamado por su familia. Una localización y exhumación de restos que se lleva a cabo previa autorización de la Junta de Andalucía, en virtud de la Ley de Memoria Histórica y Democrática de Andalucía.
Como ha destacado el concejal de Infraestructura y Servicios Municipales, Luis Albillo, “desde el inicio de la legislatura venimos trabajando desde nuestra determinación de hacer justicia con los represaliados durante la Guerra Civil y con sus familias y recuperar la Memoria Histórica de nuestra ciudad, colaborando con todas las acciones que sean necesarias”.
El edil ha precisado que, en este caso, la primera exhumación de este tipo que se realiza en el cementerio de la capital onubense, desde el Consistorio se ha estado “en contacto permanente con la familia de Masera, informándole de todos los pasos a dar”. Y es que esta intervención, ha recordado el edil, ha sido reclamada y promovida por María Luisa Masera, nieta de este minero natural del Cerro del Andévalo. Un emplazamiento que fue dirigido al Ayuntamiento de Huelva y la Dirección General de Memoria Democrática de la Junta de Andalucía, cuyo Comité Técnico de Coordinación dio viabilidad a la actuación, que ha sido ratificada a través de la Orden del Vicepresidente y Consejero de la Presidencia, Administración Local y Memoria Democrática, según aparece publicado hoy en el BOJA (Boletín Oficial de la Junta de Andalucía).
El arqueólogo Jesús Román, de acreditado prestigio en intervenciones de este tipo en toda Andalucía, dirigirá unos trabajos sufragados económicamente por el Ayuntamiento de Huelva, que también se encargará de proporcionar útiles para el señalamiento y vallado, así como disposición de espacios públicos para albergar la posible individualización y estudio antropológico de los restos, y con la estrecha colaboración de la Dirección General de Memoria Democrática, que se encargará de las gestiones y coste derivado de la identificación genética.
La actuación específica que se inicia este miércoles supone el acometimiento de una nueva intervención de las 20 aprobadas en julio de este año por parte del Gobierno andaluz, y que responden al principio de recuperación física de los cuerpos de las víctimas, como de reparación moral de sus familias, y a través del principio de colaboración entre todas las partes implicadas.