Con el lema 'Sólo tienes una piel. Protégela del daño solar', se ha puesto en marcha este año en Huelva la campaña europea contra el cáncer de piel, en especial contra el melanoma, a la que ha vuelto a sumarse la Unidad de Dermatología de los Hospitales Juan Ramón Jiménez e Infanta Elena, con el especial compromiso de reducir la incidencia de la enfermedad en la provincia, favoreciendo además el diagnóstico precoz, lo que supone en el 90 por ciento de los casos la curación o la supervivencia del paciente.
Según ha informado la Junta en un comunicado, con este ambicioso objetivo, compartido con especialistas de 34 países, los profesionales de la unidad quieren hacer un llamamiento a la población de Huelva con el fin de que atiendan a las recomendaciones de protección frente al sol, teniendo en cuenta el aumento continuado del número de casos de cáncer de piel, que alcanza ya la consideración de epidemia a escala mundial, con más de 4.000 nuevos casos cada año en todo el territorio nacional.
Un dato a tener en cuenta, mucho más cuando se estima que el 80 por ciento de los melanomas diagnosticados, el tumor más maligno y responsable del 80 por ciento de las muertes provocadas por los cánceres de piel, podrían haberse evitado con hábitos saludables de fotoprotección desde la infancia.
Teniendo en cuenta este incremento, la Unidad de Dermatología ha vuelto a participar en esta campaña europea, que tendrá lugar del 5 al 11 de junio, fechas en las que, además de concienciar a la población a través de los medios de comunicación para la adopción de hábitos saludables frente al sol, se han dispuesto dos días de consulta específica, el día 8 de junio en el Hospital Infanta Elena y el día 9 en el Centro Periférico de Especialidades Virgen de la Cinta, a las que se puede acudir con cita previa si se sospecha de algún lunar o mancha en la piel, con el fin de detectar si se trata de una lesión precancerosa o sospechosa de malignidad.
La cita puede solicitarse directamente en la web 'aedv.es/euromelanoma' o en el teléfono 91 543 45 35. La campaña está dirigida a la población general, pero sobre todo a los más jóvenes y a las familias para que extremen las precauciones, ya que si bien el cáncer de piel resulta más frecuente en personas mayores de 55 años, el aumento en el diagnóstico del melanoma registrado en los últimos años incide de manera especial entre los jóvenes de 25 a 29 años.
Los dermatólogos quieren recordar también que "la piel tiene memoria", por lo que la cantidad de radiación solar que recibe a lo largo de la vida se acumula, pudiendo llegar a generar una lesión cancerosa 20 ó 30 años después de dichas exposiciones al sol.
Fruto de esta apuesta del sistema sanitario público de Huelva por el impulso del diagnóstico precoz del cáncer de piel, se encuentra en pleno proceso de implantación en los centros de salud de la provincia la teledermatología, una nueva prestación que ya funciona en los centros de salud de Adoratrices (Huelva) y de Bollullos y que utiliza las nuevas tecnologías de la comunicación para el intercambio de información clínica entre los profesionales de atención primaria y especializada, con el fin de favorecer el rápido abordaje de las lesiones cancerosas en la piel.
Para ello, los centros de salud se están equipando con una cámara dotada de dermatoscopio, un aparato que incrementa la capacidad de resolución de las imágenes, de forma que cuando el médico de familia o pediatra sospecha de la presencia de alguna anomalía en la piel, la imagen aumentada de la misma es enviada de forma telemática al hospital de referencia para que sea revisada por los especialistas.
Así, en caso de tratarse de un cáncer de piel, desde la propia Unidad de Dermatología se incorpora directamente al paciente en la lista de espera quirúrgica para su rápida intervención, sin necesidad de consulta previa, disminuyendo sensiblemente el periodo desde que el usuario acude por primera vez al médico de familia hasta que es intervenido. La intención de la administración sanitaria es extenderla a la totalidad de centros de salud de la provincia.
Precisamente para ayudar a la población a detectar esos cambios en la piel que pueden dar lugar a una sospecha fundada, los profesionales aconsejan el método 'Abcde' desarrollado por dermatólogos; Asimetría, cuando el contorno de la lesión o lunar de una mitad no es igual al otro; Bordes, en el caso de que muestren un aspecto desigual, borroso o irregular; Color, si presentan distintas tonalidades y no muestra un tono uniforme; Diámetro, cuando superan los seis milímetros de ancho, y Evolución, si se aprecian cambios en la fisonomía del mismo.
En estos casos, es importante acudir a su médico de familia, que evaluará la lesión y le derivará al especialista para su valoración y tratamiento.
También supone una señal de alarma la persistencia de una herida que no cicatriza, la propagación del pigmento del borde de una mancha hasta la piel circundante, el enrojecimiento o inflamación más allá del borde, la aparición de comezón, sensibilidad o dolor asociado al lunar o descamación, exudación o sangrado, así como la detección de una protuberancia en la superficie de lesión.
CONSEJOS FRENTE AL SOL
Es por ello que los especialistas abogan por recordar a la población, ahora que acaba de iniciarse la temporada estival, una serie de normas básicas que deben acompañarnos durante toda la vida para minimizar los efectos nocivos del sol, considerado el factor de riesgo fundamental para la aparición del cáncer de piel.
Entre ellas destacan, en primer lugar, la no exposición solar excesiva, evitando siempre las horas centrales del día y utilizando cremas fotoprotectoras que deben aplicarse media hora antes de situarse bajo el sol.
Dichas lociones deben extenderse sobre la piel bien seca y en cantidad suficiente, repitiendo la aplicación cada dos horas y sin olvidar ciertas zonas de la piel como las orejas, los labios, el cuello y el dorso de los pies.
Se trata de una serie de precauciones que se deberán tomar aunque el día esté nublado y sin olvidar que el agua, la arena y el césped en las piscinas, sobre todo si está húmedo, reflejan la radiación solar y potencian aún más sus efectos negativos. Además, es conveniente también la utilización de gorros, gafas de sol y ropa adecuada.
En el caso de los niños y adolescentes, lo principal es la protección física, considerada como la más eficiente, con una camiseta que se pueda mojar, además de gorra y gafas, sin olvidar la cobertura de la piel al descubierto con cremas fotoprotectoras.