Agentes de la Comandancia de la Guardia Civil de Huelva han detenido a nueve individuos acusados del robo de más de 200 bombonas de gas en diversas localidades de la provincia, las cuales eran vendidas a consumidores particulares, conducta que puede implicar, además del incremento de robos, una infracción penal.

Según ha informado la Benemérita en una nota, desde principios de 2012 los servicios de análisis de la Comandancia de la Guardia Civil de Huelva estaban observando el incremento de casos de robo en los que el objeto principal de los mismos eran las bombonas de gas, siendo estas sustraídas tanto en domicilios particulares como de depósitos empresariales.

Estas bombonas eran posteriormente vendidas a un precio inferior al del mercado, por lo que preocupaba que una creciente demanda de este producto incrementara los casos de robo. Por ello se implementaron los servicios destinados a la prevención del robo de bombonas que hasta la fecha se ha saldado con la detención de nueve individuos por su participación en diferentes casos.

Las localidades más afectadas por estos hechos son La Palma del Condado y Cartaya, donde existen almacenes de bombonas, aunque se han visto afectadas otras poblaciones por diversos robos en propiedades particulares de donde se sustrajeron los recipientes de gas entre otros efectos.

Hasta la fecha se han contabilizado más de 220 botellas de gas sustraídas en diferentes robos, destacando de los cometidos en los depósitos mencionados el ocurrido en octubre de 2012 en Cartaya, cuando los autores practicaron un butrón en uno de los laterales para llevarse 22 bombonas y a la noche siguiente regresaron para llevarse otras 25 bombonas a través de otro butrón practicado junto al primero.

Como resultado de los servicios emprendidos por la Guardia Civil para frenar estos robos, los agentes incrementaron la vigilancia sobre los depósitos en que se almacenan las bombonas, llegando en varias ocasiones a sorprender a los presuntos autores en el momento en que intentaban cometer los robos.

Posteriormente a los robos los autores proceden a la venta, en algunos casos callejera, de los recipientes sustraídos a un precio notablemente inferior al del mercado. Esta conducta puede alentar el aumento de los robos, además de poder constituir una infracción penal por adquirir ilegítimamente el material robado.

La Guardia Civil ha instruido las correspondientes diligencias que han sido puestas a disposición de los Juzgados de Instrucción competentes.