El diputado de ERC Joan Josep Nuet ha defendido este miércoles, a su llegada al Tribunal Supremo para ser juzgado por un delito de desobediencia en relación con el 'procés', que el debate sobre las llamadas 'leyes de desconexión' en el Parlament de Cataluña pudo ser "criticable" pero no un "acto delictivo", asegurando que es "inocente".
La Sala de lo Penal ha comenzado hoy el juicio a Nuet por haber votado, como secretario tercero de la Mesa del Parlament de Cataluña en la XI Legislatura, en la que era diputado de SíQueEsPot, a favor de la tramitación de las 'leyes de desconexión', pese a las advertencias del Tribunal Constitucional (TC). La Fiscalía pide para él una multa de 8 meses e inhabilitación de 1 año y 4 meses.
"Afronto este juicio con valentía, con convicción, convencido de que soy inocente", ha dicho Nuet en declaraciones a la prensa a su llegada al Tribunal Supremo, donde ha sido recibido con aplausos por dirigentes de ERC como Carolina Telechea, Montse Bassa, Mirella Cortés y Bernat Picornell, así como de Junts, PdCat y CUP, y por el presidente del grupo parlamentario de Unidas Podemos en el Congreso de los Diputados, Jaume Asens.
Nuet ha confiado en poder convencer a los magistrados de que "el debate parlamentario que se produjo en Cataluña es absolutamente criticable" pero no un "acto delictivo". "Una cosa es que sea criticable y otra cosa es que se nos trate como criminales. No somos criminales, somos dirigentes políticos que tenemos opiniones políticas y, si en un Parlamento no las podemos expresar, no sé dónde las vamos a expresar", ha planteado.
Sobre lo ocurrido en torno al referéndum independentista del 1 de octubre de 2017, Nuet ha señalado que "fueron días difíciles" que hoy se pueden analizar con "un poco más de perspectiva porque han pasado los años", indicando que "el debate que hubo en las calles de Cataluña se elevó al Parlamento mejor o peor", e incidiendo en que "es criticable".
No obstante, ha sostenido que no hubo desobediencia al TC, sino que los implicados en el 'procés' hicieron lo pudieron para que "el debate se condujera de la mejor manera en el Parlamento catalán". "Por tanto, voy a usar todos los argumentos políticos y jurídicos que permiten que tenagmos una democracia y que haya parlamentos", ha avanzado.
EL DEBATE NO VA A "DESAPARECER"
En este contexto, ha aprovechado para reiterar que "por prohibir un debate" no va a "desaparecer", advirtiendo de que, "al contrario, ese debate va a emerger posiblemente pero de peor manera". "Si algo no se puede discutir en un parlamento se discutirá en la calle, en los bares, en las casas", ha subrayado.
Por ello, ha recalcado que lo mejor es que "en el parlamento se permitan los mecanismos para que ese debate político emerja", admitiendo que el TC ejerza su control constitucional, pero sin caer en lo que ha descrito como una especie de censura previa.
"Hasta ahora la jurisprudencia constitucional nos decía que no tenemos una Constitución militante, que podemos hablar de todo, pues hablemos de todo y que al final la matemática parlamentara y el control constitucional digan la última palabra, pero que no se impida el debate político", ha reclamado.
Nuet ha lamentado que "en la democracia española esto no ocurría pero está ocurriendo en los últimos tiempos", aludiendo a la decisión de la Mesa del Congreso de no admitir la ley de amnistía registrada por diputados catalanes. "Espero que esta deriva no se consolide, sino que de alguna manera se vuelva a abrir el parlamento a todos los debates", ha concluido.