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España

Obama, un mochilero en palacio

Se ha visto a Obama relajado y conversador, no ha parado de hablar con el Rey mientras ambos recorrían las principales estancias del Palacio de Oriente

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El presidente de los EEUU, Barack Obama, no olvida los tiempos en que recorrió Europa como mochilero, y en los que ya estuvo en Madrid, y hoy lo ha recordado con humor ante el Rey Felipe VI, en el imponente espacio del Salón de Columnas del Palacio Real donde ha sido agasajado con una especial bienvenida.

"La primera vez que estuve en Madrid no vine en el Air Force One, era joven, llevaba una mochila a la espalda, iba andando a todas partes y comía en plan barato", ha dicho Obama generando risas entre las dos delegaciones de autoridades de España y los EEUU reunidas para darle la bienvenida en la misma estancia donde hace dos años el Rey Juan Carlos I firmó su abdicación.

El anticipo de su regreso a los EEUU por el tiroteo de Dallas ha mermado un programa de actos que iba a tener en Sevilla, durante la mañana de hoy, sus momentos más vistosos, con una visita por el centro histórico de la ciudad guiado de la mano de Felipe VI, que iba a hacer de anfitrión en la ciudad hispalense.

La reducción de la agenda ha obligado a Zarzuela a sustituir el almuerzo en el comedor de gala del palacio que iba a celebrarse mañana lunes, con un centenar de invitados, por una ceremonia más breve y sencilla, pero en la que se ha procurado incluir detalles que demuestran una especial deferencia hacia el presidente de "un país amigo y decisivo en el mundo", como ha dicho el Rey Felipe.

Así, durante la hora y veinte minutos en que el antiguo mochilero Obama ha permanecido en el Palacio de Oriente, ha podido apreciar toda la solemnidad y protocolo del ceremonial palaciego, como la vistosa imagen de los alabarderos de la Guardia Real que le han rendido honores a su paso en el Zaguán de Embajadores o el sonido del pífano y el tambor según subían las escaleras principales.

Se ha visto a Obama relajado y conversador, no ha parado de hablar con el Rey mientras ambos recorrían las principales estancias del Palacio de Oriente y ha improvisado unas palabras de bienvenida en respuesta al breve discurso leído por Felipe VI en el Salón de Columnas, sede de importantes acontecimientos históricos.

La Cámara Oficial, donde el Rey celebra la presentación de cartas credenciales de los nuevos embajadores, ha sido el escenario elegido para la reunión bilateral, en la que se han dispuesto dos sillas para ambos, con una mesita baja donde había dos vasos de agua y dos filas perpendiculares a los flancos con cinco sillas cada una para los miembros de las delegaciones de autoridades de los dos países.

En ese espacio solemne, el mochilero de 1988 ha mantenido su reunión con el jefe del Estado, ante el que antes había expresado su deseo de volver a España con más tiempo, ya no como presidente, además de confesarle que su esposa Michelle y sus hijas "aman a España".

El Rey le ha regalado una joya bibliográfica, en el cuarto centenario de la muerte de Cervantes, un ejemplar en inglés del Quijote editado por Penguin y traducido por John Rutherford, encuadernado en piel de forma artesanal.

El volumen incluye una dedicatoria con las firmas del Felipe VI y la Reina Letizia -que en esta ocasión no verá a Obama- en la que se menciona la famosa cita sobre la libertad que figura en el capítulo 58 de la segunda parte del Quijote: "La libertad, Sancho, es uno de los más preciosos dones que a los hombres dieron los cielos".

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