Al entrenador y jugadores del Baloncesto Sevilla no se les podrá reprochar que no hiciesen su labor dentro de la pista; pues el triunfo de los sevillanos este domingo en la cancha de Manresa, certifica con la calculadora en la mano, la salvación deportiva del conjunto hispalense.
Con un juego coral por parte de los de Luis Casimiro, cuyo tiro exterior resultaría decisivo, el bloque de San Pablo ya puede decir, que al menos en lo que al parqué se refiere, se ha ganado una plaza en la próxima Liga Endesa.
Luke Hakanson (15 puntos y 18 de valoración), se erigió como el mejor del cuadro cajista, junto con Nachbar (15) y Bamforth (14), como los máximos anotadores del duelo disputado en el Nou Congost de Manresa.
Ya con la permanencia obtenido, el más difícil todavía, aunque no imposible, sería el playoff, que se otea a dos plazas faltando tres jornadas.
ICL Manresa (14+23+14+14): Foster (4), Simon (13), Grigonis (13), Auda (12), Musli (11) -cinco inicial-, Flis (-), Jaramaz (-), Sandul (-), Hernández (1), Otverchenko (2), García (9) y Costa (-).
Baloncesto Sevilla (21+20+14+17): Hakanson (15), Sánchez (3), Bamforth (14), Nachbar (15), Jordan (6) -cinco inicial-, Rodríguez (2), Balvin (10), Miljenovic (1), Henton (2) y Oriola (4).
Árbitros: Hierrezuelo, Araña y Sánchez Mohedas, que eliminaron por cinco faltas personales a Dejan Musli (min.36) y Jerome Jordan (min.37).
Incidencias: 4.480 espectadores se dieron cita en el Pavelló Nou Congost.
