Día de análisis y de recibir flores por parte de la futbolería nacional por el empaque mostrado en el partido del sábado en el Camp Nou frente al Barcelona de los Messi, Neymar e Iniesta. Jornada que, en estos casos, sólo resulta fructífera si tantos halagos son recibidos no para asentar cátedra, sino para desplegar aún con más ahínco el buen fútbol en los próximos partidos.

No seremos nosotros quién descorra el telón que distorsiona la ficción de la realidad, pero nunca está de más poner la pelota en el piso y hablar de lo que al fin de cuentas siempre termina siendo útil al final, los números. Y es que, más allá de Muñiz Fernández y su discutida actuación en el feudo culé, los nervionenses han sellado con la segunda derrota liguera su peor arranque en 30 años. Sólo dos puntos en cuatro partidos jugados. O lo que es lo mismo, dos empates y gracias, porque sólo el punto cosechado ante el Levante fue merecido.

Habría que remontarse a la temporada 1981/1982 para encontrar cifras inferiores a las actuales. Entonces, Miguel Muñoz daba las órdenes desde el banquillo y los Buyo, Pintinho o Francisco defendían los colores en el campo. Sólo un empate albergaban por esta misma jornada, pero ha llovido tanto que pocos son los parroquianos que lo recuerdan. Ahora, sólo las sensaciones invitan a la esperanza. Pero, ¿es suficiente?

 

8 goles encajados en Liga

No sólo es el peor arranque en puntuación, sino también en tantos recibidos. Desde 1962 no encajaba tantos goles como hoy.

 

0 triunfos cosechados

Es el gran lastre de los de Nervión. Las sensaciones no han dejado aún una victoria en el casillero y comienza a escamar.