Entre el éxito aún por completar de la Copa del Rey y las expectativas volcadas en la Champions, el Real Madrid abandona la Liga y dejó más libre la vía al Barcelona que puede alargar su ventaja a los quince puntos al término de la jornada.
Nada que ver la exhibición en el Camp Nou con la visita del Villarreal que el conjunto de Carlo Ancelotti afrontó con una revolución en su once, con la mente dividida entre una liga perdida, el cúmulo de esfuerzos en la Copa y las previsiones y planes para Europa, ante el Chelsea el miércoles.
Tanto cálculo falló al preparador italiano que se estrelló, otra vez en el Santiago Bernabeu, ante el Villarreal, que salió de Madrid con los tres puntos, sus expectativas europeas disparadas y ciertas dudas generadas en el cuadro blanco que puede sentir la amenaza del Atlético Madrid en su segundo puesto.
El cuadro rojiblanco se puede poner a dos puntos de su vecino si gana al Rayo Vallecano el domingo.
En pleno correcalles, en un partido abierto, sin tregua, fue el Villarreal el que volvió a disfrutar en el Bernabeu. Se le atraganta al Real Madrid la estrategia de Quique Setién que suele sacar renta de sus visitas al feudo blanco sea con el equipo que sea.
Dejó en evidencia su defensa el Real Madrid que tomó ventaja con un autogol de Pau Torres y después con otro de Vinicius pero que sufrió con los espacios que permitió al ataque amarillo donde sobresalió Samu Chukwuece y también, después, Jose Luis Morales, verdugos del bloque blanco.
El tercer triunfo seguido lleva al Villarreal a la quinta plaza y tiene a tiro la cuarta que protege la Real Sociedad, triunfadora frente el Getafe.
SECUELAS DE LA COPA
La otra semifinal de Copa tuvo un efecto balsámico en el Athletic, que se alivió contra el Espanyol, y eufórico para el Osasuna que prolongó la dinámica para ganar al Elche y volver a ganar en LaLiga.
Una vez resuelto felizmente para sus intereses el conjunto navarro acabó con la distracción copera que le había condicionado en sus últimos compromisos. Mucho tuvo que ver el sosiego tras la clasificación y la fragilidad del adversario, el Elche.
El Osasuna redondeó su espectacular semana con una remontada propiciada por el marroquí Abde que respondió al tanto inicial de los visitantes firmado por Tete Morente (2-1). El equipo de Jagoba Arrasate volvió a ganar en LaLiga mes y medio después.
"Ha sido una semana buenísima. Era un partido para no fallar", indicó el preparador del Osasuna que recibió al Elche aún con la resaca copera en el cuerpo y que reactiva su puja por los primeros puestos.
Para el Athletic fue un alivio el reencuentro con LaLiga. Especialmente para los hermanos Williams y, sobre todo, para Nico, afectado por los tantos fallados en la semifinal.
Pero los dos cumplieron, los dos marcaron y afearon el estreno de Luis García como nuevo entrenador del Espanyol (1-2) que encajó un nuevo revés y que siguen anclados en la zona de descenso.
Iñaki abrió el marcador en el 22 y sentenció el duelo Nico a un cuarto de hora del final. En el añadido, casi sin tiempo para más, acortó distancias Darder.
Los periquitos, que encadenan cinco derrotas, siguen en la zona de descenso de la clasificación, mientras que los vascos pasan página tras la eliminación copera del pasado martes, a manos de Osasuna. Además, el Athletic consigue ganar en el feudo catalán, algo que no lograba en LaLiga desde la temporada 1997-98.
"El choque era una prueba y supone más de tres puntos”, reconoció Ernesto Valverde. "El equipo necesitaba una respuesta y llegó en un momento clave. Este partido era fundamental para afrontar estas diez jornadas con ganas e ilusión. Se va a decidir todo. Empezamos a descontar y ya no hay margen”.
Al Espanyol le va a dejar una jornada más en descenso. Aún así, el nuevo preparador, Luis García, vio el lado positivo. "Queda una sensación de esperanza. Veo a un equipo comprometido y con progresión, ilusión y responsabilidad”.
LA REAL, MODO CHAMPIONS
La Real Sociedad insiste en la Champions. Es el objetivo evidente del cuadro donostiarra que pretende reencontrar la regularidad del primer tramo del curso y el acomodo en la parte alta. Por eso insiste en el cuarto puesto, la vacante más a mano dado el estirón del Atlético Madrid y el cerco al que ha sometido, al menos, al tercer lugar.
No ha alcanzado la brillantez de antaño el conjunto de Imanol Alguacil. No la necesitó tampoco para doblegar al Getafe que apenas inquietó y que se centró en contener más en proponer. No aflojó el equipo donostiarra a pesar del fallo del penalti lanzado por Mikel Oyarzábal en el tramo final de la primera parte. David Soria lo detuvo.
El internacional se desquitó antes del intermedio y abrió el marcador en el añadido de la primera parte. Después, el japonés Takefusa Kubo amarró la victoria en la segunda parte.
Con la victoria, la Real Sociedad se sitúa a tres del Atlético Madrid, que el domingo juega con el Rayo Vallecano y aleja a seis al Betis, también con el encuentro pendiente de la jornada, frente el Cádiz.
El Getafe da un paso atrás. Cuatro partidos después se reencontró con la derrota. Una advertencia para el cuadro de Quique Sánchez Flores aún con la permanencia por aproximar. Solo tres puntos le separan del descenso.
"Han sido mejores y no hay nada más que decir. Hay rivales que están fuera de nuestro alcance", asumió el técnico del conjunto madrileño que se acerca a una zona de descenso de la que no termina de escapar el Sevilla que el viernes dejó escapar, en el tramo final, dos puntos contra el Celta en el Sánchez Pizjuán.
Jugó más de una hora con un jugador menos el cuadro hispalense por expulsión de Pape Gueye que llegó al tramo final con dos goles de ventaja firmados por En Nesyri y Marcos Acuña pero que en cuatro minutos neutralizaron Miguel Rodríguez y Gonzalo Paciencia.