El sindicato Comisiones Obreras ha denunciado este martes que la mitad de las limpiadoras del Hospital de La Línea "están de baja o de jornada reducida".
Este sindicato ha vuelto a denunciar la "absoluta precariedad" en la que afirman que se encuentra el servicio de limpieza del Hospital de La Línea y las "nefastas consecuencias" que esta situación "está teniendo en las trabajadoras y en los exigibles parámetros de calidad en prestación del servicio". Es por ello que CCOO prepara una denuncia para reclamar la intervención de la Inspección de Trabajo.
CCOO señala que, de una plantilla de 44 limpiadoras que prestan sus servicio en el Hospital de La Línea, y que deben mantener el mismo los 365 días del año y las 24 horas del día, 13 de ellas se encuentran en situación de baja médica y 15 tienen jornada reducida, lo que supone prácticamente la mitas de los efectivos; estos son los datos aportados por CCOO para denunciar la crítica situación que padece el servicio de limpieza de este centro sanitario.
Para este sindicato, la no sustitución de las bajas en una ya de por si mermada plantilla está poniendo en riesgo la correcta prestación del servicio y la salud de las trabajadoras, “el volumen de bajas tiene mucho que ver con el estrés laboral al que están sometidas estas limpiadoras a las que se les obliga a mantener el servicio con mucho menos personal del necesario”.
CCOO anunciaba igualmente que su secretaría de Salud Laboral está preparando un informe que servirá como soporte a una denuncia que tienen previsto presentar ante la Inspección de Trabajo, con el objeto de reclamar la actuación de la autoridad laboral en una situación que consideran inaguantable por más tiempo.
Este sindicato recordó que viene denunciando desde hace tiempo "la inoperancia del pliego de condiciones que rige la prestación de este servicio y que la práctica ha demostrado que no se compadece con la realidad de las necesidades del servicio de limpieza hospitalaria". El secretario comarcal de Organización de esta formación, Manuel Triano, agrega que "las autoridades sanitarias deben tomar medidas, asumir que el modelo de concesión fue un error y abrir un nuevo concurso público que se adecue a las necesidades reales que requieren los centros sanitarios”.
