Los afiliados de Vox han decidido por abrumadora mayoría romper con la primera hornada de representantes de la formación en Cádiz, que constituye un frente crítico con la dirección nacional desde abril de 2019 después de que esta apostara por Agustín Rosety como número uno al Congreso de los Diputados en detrimento de Manuel González, vicepresidente provincial entonces.
El candidato oficialista en las elecciones primarias, el isleño José Ortells, se impuso esta semana con una holgada ventaja a Ramón Aumesquet, responsable de Vox en Jerez, cuya candidatura estuvo patrocinada por los díscolos. Ortells obtuvo un 53% más de votos al término de una proceso electoral que ha evidenciado la ruptura total de los dos bloques y ha retratado dos modos de afrontar la política radicalmente diferentes.
Mientras que el nuevo presidente ha optado en campaña por un discurso moderado y constructivo y eludiendo los continuos ataques personales a su equipo y a él mismo en redes sociales por parte del entorno del aspirante contrario, Aumesquet ha cometido errores de bulto que han frustrado sus expectativas. El primero de todos ellos, decisivo a la postre, fue no aceptar la propuesta de debate que puso sobre la mesa Ortells para detallar sus respectivos modelos de partido. Pero no solo le ha pasado factura por la equivocada negativa, sino por los modos que empleó. El abogado publicó en su perfil de Facebook una andanada contra su contrincante que la militancia censuró. La reacción, desproporcionada, solo sirvió para inclinar la balanza del lado del candidato oficialista desde el inicio.
Este aprovechó el error táctico de Aumesquet, quien parecía rehuir del contacto directo con los afiliados definitivamente al rechazar también una reunión online, para ofrecer transparencia y participación por medio de conexiones en directo a través de Facebook, en las que dialogaba con los votantes.
El papel que han desempeñado, asimismo, nombres relevantes vinculados al sector crítico, muy activos en redes sociales, ha relegado a un segundo plano a Aumesquet y su equipo. A unas horas de conocer los resultados, la carta de Juan Carlos Sanz, ex presidente de Vox y portavoz del grupo municipal en el Ayuntamiento de El Puerto, con durísimas acusaciones contra Ortells, ha sido reveladora porque reúne en un documento los argumentos que han defendido en las dos últimas semanas. El intento de desligitimar la consulta solo ha conseguido retratar a los críticos como nostálgicos incapaces de asumir el relevo, con ganas de ajustar cuentas, en palabras de un destacado dirigente. Los afiliados quieren mirar al futuro. En esa clave han votado. Los excelentes resultados en las generales son prometedores. Quieren multiplicar, no dividir. Vox ha decidido pasar página de una vez.