Los amarillos quieren cerrar cuanto antes su liderato y una jornada más no dejaron escapar puntos del estadio Carranza. Para ello salieron más concentrados que nunca, ya que el precedente era la única derrota casera del año y doblegar a un filial nunca es fácil, menos aún cuando va clasificado en tercera posición.
Sorprendió Claudio dejando en el banquillo a Fran Machado, que parecía uno de sus intocables. La sorpresa era mayor aún porque, teniendo en cuenta la ausencia de Juanma Espinosa por lesión, retrasar a Machado era una opción no muy descabellada. Pero finalmente el técnico optó por formar el mediocentro con Navarrete y Mantecón, dejando en las bandas a Juan Villar y Kike Márquez como escoltas de Airam Cabrera y Jona.
Transcurría el partido con tranquilidad y con Claudio Barragán sin su mano derecha, Alfredo Santaelena, sancionado para este partido y uno más tras su expulsión. Muy bien plantado en el terreno de juego, el equipo almeriense tenía claro el juego que debía hacer si quería sacar algo positivo del encuentro. Tocando el balón con calidad, pero sin arriesgar demasiado, el filial rojiblanco se acercó en un par de ocasiones a la portería defendida por Aulestia. Aunque sin excesivo peligro, en el segundo de estos acercamientos tuvo que aparecer la cabeza salvadora de Andrés para evitar un remate visitante en la misma línea de gol.
Avisó Juan Villar de su inspiración con un regate de espuela que le permitió marcharse por la banda con rapidez. Al final, esa jugada quedaría en nada, pero el onubense apuntaba alto y se mostraba confiado en protagonizar un buen partido.
Dicho y hecho, su siguiente acción fue abrir el marcador. Un centro de Airam desde la banda izquierda se paseó por delante de toda la defensa y del portero visitante hasta llegar al segundo palo, en el que aguardaba Juan Villar para no perdonar el gol.
Una vez más, el Cádiz dominaba el marcador en casa, pero visto el último precedente con un filial no se confiaría en la hora larga de partido que tenía por delante.
El gol obligaba a los visitantes a asumir algún riesgo más, mientras que a los amarillos les aportó tranquilidad para desplegar su mejor fútbol. Con estos ingredientes, una preciosa combinación entre Villar y Jona finalizó con un taconazo del hispano-hondureño para dejar solo a Kike Márquez, que no supo afinar la puntería para marcar.
Sólo a balón parado se acercaba el Almería B, que rozó el empate con un remate salvado en la línea por la defensa del equipo gaditano. Pero eran acercamientos aislados que apenas preocupaban a los locales.
Mucho más clara fue la siguiente ocasión cadista, propiciada por una cesión al meta almeriense. Gianfranco se temió lo peor al ver al Cádiz CF prepararse para lanzar una falta dentro de su área, pero el disparo de Kike Márquez, sin apenas espacio, se estrelló contra uno de los defensores que salieron con rapidez a tapar todos los huecos posibles.
Con poco o nada más que contar se llegó al descanso de un partido aburrido, con bajo ritmo y que los amarillos controlaban gracias a su superioridad técnica. Pese al marcador favorable, lo ajustado del mismo obligaba a dar algo más en la segunda parte para mantenerlo y evitar disgustos innecesarios.
Con más fuerza salieron los almerienses en la segunda mitad, pero su primer acercamiento fue abortado por la línea defensiva cadista.
Poco a poco, los visitantes se iban haciendo con el partido de forma preocupante. Aulestia tuvo que salir un par de veces para evitar males mayores y en las gradas se temía lo peor porque el empate parecía muy próximo.
Pero cuando mejor estaba el Almería B y peor el Cádiz llegó el 2-0. Una rápida jugada a la contra finalizó con un medido pase de Jona a Kike Márquez, que, apuntando con tranquilidad desde dentro del área, puso el balón pegadito al poste izquierdo de Gianfranco. Era el gol de la tranquilidad frente al tercer clasificado, que aunque perdiendo, dejaba claro el motivo de su buena clasificación.
No se debió marchar muy contento Airam Cabrera, que dejó su lugar a Garrido con veinte minutos por delante. Claudio había decidido conceder tiempo al mediocentro, recién recuperado de una lesión pero con el 2-0 y muchos huecos para marcar de nuevo no gustó demasiado la retirada del ariete canario.
Kike tuvo tiempo de devolver a Jona el favor en forma de asistencia. El sanluqueño buscó al goleador dentro del área y, aunque en el segundo intentó, consiguió cederle el balón en la posición perfecta para hacer el tercer tanto. El internacional no dejó pasar el regalo y el 3-0 lució.
De ahí al final, control y más control absoluto por parte de un Cádiz CF que tiene casi asegurado ya ser campeón del Grupo IV.
- Ficha Técnica -
- Cádiz CF: Aulestia, Óscar Rubio, Servando, Josete, Andrés Sánchez, Navarrete, Mantecón, Juan Villar (Migue García, min. 54), Kike Márquez (Hugo Rodríguez, min. 81), Airam Cabrera (Garrido, min. 67) y Jona.
- UD Almería B: Gianfranco, Akrong (Carlos Selfa, min. 63), Charlie, Míchel, Adri, José Ángel, Mario Martos (Rubén, min. 63), Iván Sánchez, Hicham, Puertas (Gaspar, min. 75) y Dani Romera.
- Goles:
1-0 Juan Villar (min. 25)
2-0 Kike Márquez (m.63)
3-0 Jona (min. 79)
- Árbitro: Pulido Santana (Comité canario). Amonestó con cartulinas amarillas a Kike Márquez (min.t 3) y José Ángel (min. 57).
- Incidencias: Partido correspondiente a la jornada número 31 de la liga regular en el Grupo IV de Segunda División B. Buena entrada en el estadio Ramón de Carranza (11.000 espectadores).
