Cuenta la memoria popular y también los archivos históricos que el Señor de Columna salió a mediados del siglo XIX en procesión de rogativa por la fuerte sequía que asolaba a la Península, motivo por el cual se le empezó a conocer con el sobrenombre de ‘El Aguaor’. Como suele ocurrir en estos casos, la leyenda hace el resto, y hay quien dice que cuando se mueve al Señor de Columna, llueve, en cambio ayer no fue así. Los hermanos de esta Archicofradía pudieron disfrutar de un día histórico, con la Imagen de su Cristo como principal protagonista del Via Crucis de Hermandades y Cofradías que se celebró en la Catedral. La Iglesia de San Antonio estuvo abierta desde las seis de la tarde para recibir la visita de los fieles. Una hora más tarde, empezaban a llegar las primeras representaciones de las hermandades.
El Señor lució para la ocasión histórica un sudario de tela que pertenece a la Hermandad y con el que el Cristo procesionaba hasta la década de los 40. La parihuela también fue realizada para este Via Crucis por un grupo de hermanos.
Los cofrades de Cádiz sintieron que por fin saldaban su deuda y se hacía justicia con esta cofradía. Una corporación que tiene como Titular una obra de Jacinto Pimentel, con más de 350 años de historia y que, sin embargo, aún no había presidido el Via Crucis General. No es normal, y quizás por este motivo el acto de ayer fue todavía más especial.
El rezo comenzó a las 21 horas en la Catedral y en él se pudo escuchar el estreno de varias piezas musicales compuestas para la ocasión. Sobre las 22.15 horas la comitiva emprendía el camino de regreso a San Antonio.
La columna representaba ayer todos los males que aquejan a los gaditanos, y el Señor una vez más se entrega a ella, dispuesto a sufrir con nosotros nuestras penas. Ya ha empezado la Cuaresma, comiencen a sentirla.
