Encandilados por sus amaneceres, enamorados de sus playas, prendados por su gente y atraídos por su rica gastronomía, Pilar Rodríguez y su hijo Manuel Fernández decidieron, hace ahora doce años, iniciar un sueño empresarial en el lugar que se había convertido en su particular paraíso vacacional: Zahara de los Atunes.
La esencia de sus platos “consiste en una cocina de fondo, tradicional, de sofritos, jugos, caldos... productos de calidad e ingredientes de todo el mundo”, afirma Jose Carbonell, jefe de cocina de Kraken“Se nos presentó la oportunidad y no dudamos en aprovecharla”, recuerda Pilar, quien junto a Manuel inauguraron en 2009 en una de las playas más hermosas del litoral andaluz el chiringuito ‘Los Sueños”. Una apuesta por la gastronomía más exquisita que, verano tras verano, goza de una gran aceptación y que ha consolidado una exitosa fórmula de turismo gastronómico que combina a la perfección el disfrute de una fusión de la cocina tradicional aplicando las técnicas más innovadoras, con el gozar de un edén lleno de luz donde la belleza se percibe con solo alzar la mirada.
Siguiendo la línea de arena fina, la espuma de las olas y el azul de mar; una década después estos madrileños enamorados del litoral barbateño, fijaron su mirada en lo que es, sin duda, uno de los lugares con mayor potencial de todo el municipio: el Paseo Marítimo y su playa del Carmen. Así, y un poco más tarde de lo previsto, debido a la crisis sanitaria del coronavirus, en julio de 2020 abrió sus puertas Kraken, el nuevo restaurante de Pilar y Manuel, que se ha sumado a la apuesta por una cocina innovadora y de calidad que desde hace años viene abanderando el sector local de la restauración.
La espectacularidad del local de Kraken es toda una declaración de intenciones. Cuidando hasta el más mínimo detalle, este restaurante barbateño se presenta a vecinos y foráneos en primera línea de la que ha sido denominada la playa más accesible de España. Con una exquisita decoración en madera, con predominio de colores verdes, marrones y blancos, que juegan con las luces de día y noche; Kraken resulta simplemente elegante a la vista. No en vano, el local ha sido objeto de una reforma integral, cuyo resultado, desde un punto de vista estético y funcional, marca la diferencia de lo que este establecimiento hostelero fue años atrás. Además, este verano estrenará su terraza chill out para hacer más cómodas las sobremesas y las noches veraniegas.
Comer con los cinco sentidos
Pero la apuesta de Kraken no es solo visual. Los cinco sentidos se sientan a la mesa para disfrutar de cada plato que el jefe de cocina, Jose Carbonell, persona de máxima confianza de Pilar y Manuel, presenta en carta y sugerencias a los comensales.
“La oferta gastronómica de Kraken está muy ligada a la del Chiringuito ‘Los Sueños’, tienen muchos puntos en común y un estilo de cocina similar, aunque con distintos matices”, explica Carbonell. Aunque la esencia, continua el jefe de concina de Kraken, “consiste en una cocina de fondo, tradicional, de sofritos, jugos, caldos… productos de calidad e ingredientes de todo el mundo”.
Productos, en su mayoría, locales, y otros con denominación de origen de cada tierra, “porque lo que perseguimos en Kraken es invitar a los comensales a probar cosas diferentes, a disfrutar de sabores sorprendentes y a conocer nuestro estilo, a veces arriesgado, de fusión para deleitar el paladar”. Eso sí, el atún rojo de almadraba es de Gadira y las carnes de El Descansillo (Sevilla); las verduras de la huerta de Conil y “apostamos por los productos de temporada para adaptar nuestras sugerencias de la casa”, afirma Jose Carbonell.
Kraken presenta en junio su nueva carta que conservará sus clásicos como el sándwich de atún, la caballa a la llama –que se sirve con helado de pepino, apio y gel de mandarina que se sopletea en el momento- o su plato estrella: los callos marinos.
En carta se recogen cuatro referencias al atún rojo salvaje de almadraba, ostras, mejillones y navajas al carbón; además de sus nuevas Cocochas a la Marinera, sus exquisitas albóndigas de choco, sus arroces, etc.
“No es una carta extensa ya que nuestras propuestas son únicas y personales y requieren mucha elaboración”, afirma Carbonell, quien recomienda cualquiera de los platos para compartir, aunque como sugerencia deja la parpatana de atún, la chuleta de raya, la costilla de ternera o el churrasco de pato. Sin olvidar, claro está, unos deliciosos postres que completan una carta del todo apetecible.
Apuesta por Barbate
Satisfechos con la acogida han tenido durante su primera temporada, Kraken afronta una nueva época estival con ganas e ilusión. “Hemos venido para quedarnos”, afirma Pilar, quien reconoce que “hemos tenido muchos clientes de fuera de Barbate, pero nuestra apuesta pasa por complacer a todos los púbicos, sobre todo a barbateños y barbateñas, a los que invitamos a probar nuestra cocina y a que nos den la oportunidad de sorprenderles con una cocina diferente.
