Si algo no está faltando en estas fiestas navideñas en Arcos son los encuentros, más o menos clásicos, que están invitando a la población a salir a la calle. Prueba de ello fue la primera edición, y por tanto novedosa, de la cabalgata de Papá Noel, que el pasado sábado dejó un extraordinario ambiente en la calle Corredera. El pasacalle quedó compuesto por dos carrozas; la primera inspirada en un tren que figuradamente porta los regalos que Papá Noel reparte a los niños y niñas; y la segunda con el tradicional reno que tira del trineo del viejo Santa Claus, que viaja simbólicamente para saludar y agasajar a pequeños y mayores. Porque el acto en sí tenía un componente claramente familiar, reuniendo a distintas generaciones en torno a una nueva estampa navideña que regala Arcos.
Para aderezar el pasacalle, el fenomenal grupo de baile de la academia de las hermanas Barba que puso la nota de alegría en el recorrido, así como la charanga que interpretó sus villancicos al ritmo de la trompeta.
La cabalgata contó con el añadido de la aparición de personajes como los soldaditos, las supuestas luciérnagas, los elfos y otros del mundo de la animación, amén de una hilera de papás Noel y, en este caso también, de mamás Noel. En suma, un encuentro tan divertido como atípico teniendo en cuenta el peso de los Reyes Magos en la cultura ancestral, pero que no dejó indiferentes a quienes tuvieron ocasión de compartir tan surrealista imagen. Todo vino a corroborar que Papá Noel se ha colado definitivamente por la chimenea de las nuevas costumbres y que se viene imponiendo en los gustos navideños.
Antes de la cabalgata, se abrió la Casa de Papá Noel con toda su magia, ocasión que brindó a niños y niñas una serie de talleres navideños y otras actividades con las que sentir de cerca la Navidad. Santa se metió literalmente en una transparente burbuja que simulaba un pequeño iglú: fantasía total.
La Delegación de Fiestas, como artífice de estos actos, puede concluir que se cumplieron los objetivos de hacer felices por unas horas a los niños y niñas de Arcos. También la hostelería se puede sentir satisfecha porque el buen ambiente se trasladó a los establecimientos reportando un negocio extraordinario.
