El tiempo en: Alcalá la Real
Publicidad Ai
Publicidad Ai

O César o nada

La absurda lógica de las inercias legales nos somete a otra tortura psicológica de soportar el replay de una campaña obsoleta de ideas.

Publicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai

La clase política ha de cruzar el Rubicón en Junio, porque han distraído cinco meses de sus vidas y las nuestras, en una batalla verbal acerca de las bondades de cada uno de ellos, sin pensar en el país que están obligados a gobernar.

La notoria anteposición de sus intereses personales, ya no se podría decir ni siquiera partidistas a la luz del comportamiento de algunos, a los intereses generales, que cacarean en medio de sus invectivas mediáticas, hablando para no se sabe quién, está dejando en evidencia a una clase política, que no está ni medianamente a la altura de las circunstancias.

Ahora a la ciudadanía nos viene algo peor. La absurda lógica de las inercias legales, nos somete a otra tortura psicológica de soportar el replay de una campaña obsoleta de ideas, carente del menor interés, en la que ellos harán una catarsis colectiva, se victimizarán una y otra vez, exculpándose al tiempo que culpan a los otros, y nos volverán a pedir el voto para no se sabe qué.

O César o nada. Los líderes políticos quieren ser Presidentes del Gobierno, y ofrecen las Vicepresidencias a los que consideran ideológicamente más próximos. Al tiempo, afilan los cuchillos para eliminarlos como fuerzas políticas, y se descalifican mutuamente hoy, para disculparse pasados unos meses. La retórica del poder está resultando ser de esta forma, una especie de bolero de Ravel, o un Sísifo que sube y baja, aunque en este caso sin la pesada piedra a la espalda.

¿Tendremos que constatar en estos meses, que vamos a pagar otra campaña con nuestro trabajo, que cada vez nos pagan peor, para volver a vivir nuevamente este folklore popular de la política? 
Aquella transición, que tan poco gusta a esta enardecida juventud descubridora de mediterráneos, acuñó un término que trajo a este país muchos años de desarrollo institucional, político y personal durante algunas generaciones: consenso.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN