La joven María Isabel Sierra, de 22 años, cuyo cadáver apareció este lunes flotando en el río Guadalquivir, falleció ahogada, sin signos de violencia y en un aparente suicidio, según los forenses.
Fuentes de la investigación han informado a Efe de que el avance de autopsia que será enviado al juzgado de instrucción 3 de Coria del Río indica que la joven murió ahogada, en lo que apunta a un suicidio dadas las circunstancias, ya que María Isabel tenía antecedentes psiquiátricos, incluso con ingreso hospitalario, y su novio relató que horas antes de su desaparición la notó “ausente” y le dijo que era capaz de hacer “cualquier tontería”.
El avance de la autopsia, que ha sido realizada este martes por la mañana en el Instituto de Medicina Legal de Sevilla, debe ser completado con el análisis de vísceras y otros parámetros enviados al Instituto Nacional de Toxicología, han precisado las citadas fuentes.
Los forenses han constatado también que la joven compró ciertas sustancias antes de su desaparición.
El cadáver de la joven, que estaba desaparecida desde el pasado jueves, fue hallado el lunes en el Guadalquivir a su paso por la localidad de La Puebla del Río y no presentaba signos aparentes de violencia.
El cuerpo fue encontrado por unos pescadores en una zona que fue rastreada por la Policía, por lo que los investigadores suponen que el cadáver empezó a flotar 72 horas después de permanecer sumergido.
El juez de instrucción número 3 de Coria, Antonio Guisado Zúñiga, ordenó el levantamiento del cadáver, después de que la Policía Nacional acordonara la zona.
Multitudinario funeral
Mientras, la parroquia de San José, en Coria del Río ha albergado este martes una multitudinaria misa funeral en memoria de la joven. Prácticamente “todo el pueblo”, según ha manifestado a Europa Press Concepción Ufano, concejal de Presidencia de Coria, se ha dado cita en el funeral para arropar a la familia en estos trágicos momentos.
Ufano ha explicado que el funeral ha sido celebrado en torno a las 12,30 horas y a él ha asistido prácticamente “toda Coria”, con los miembros de la Corporación municipal incluidos. “Han sido unos momentos muy emotivos, hemos intentado arropar a la familia, pero están pasando un momento muy fuerte”, ha explicado la concejal.