El tiempo en: Alcalá la Real
Publicidad Ai
Publicidad Ai

El camposanto es invadido por familiares que rinden homenaje a sus seres queridos

Las inmediaciones se hacen intransitables por la carga de coches aparcados

Publicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai
  • Los hay fieles a sus seres queridos que no se olvidan de traer flores.

Desde bien temprano, el camposanto portuense ha sido invadido por familiares que quieren hacer su particular homenaje a sus seres queridos en un día que entienden como propio de aquellos que ya no están. Los hay fieles a la tradición que hoy acuden como todo el año a cambiar las flores de los nichos o las lápidas, y en cambio hay otros tantos que parece que visitan el cementerio por ver a gente conocida. Los valores sin duda cambian, pero en la conciencia de cada uno queda el por qué de su visita.

Algunos familiares aseguran ir todas las semanas a limpiar el nicho o la lápida, a mantener una conversación con los suyos, a cambiar sus flores, e incluso para recordar a otros seres queridos, aunque no sean familiares directos, pero sí amistades o conocidos. Pero un día como el de ayer no quieren perdérselo, porque es una jornada que quieren dedicar a sus seres queridos.
Pero también reconocen que si todo el mundo eligiera un día señalado para acudir al cementerio, la jornada de ayer, como ocurre otros años, no sería un verdero caos, como pasa finalmente, porque no hay espacio para todos los que acuden, ni cubos o escaleras para limpiar el espacio de cada familia.

Con todo, el punto álgido de las visitas parece que se producirá alrededor de la hora de comer, y ya por la tarde los más rezagados acudirán, algo más solitarios, a velar a los suyos.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN