El presidente de la Junta de Andalucía y secretario general del PSOE-A, José Antonio Griñán, anima a sus parlamentarios, tanto en Andalucía, España y Europa, a ejercer una "oposición responsable más atenta a las soluciones que a los problemas" y en este sentido sean "una alternativa" al Gobierno del PP, que "destruye consensos constitucionales".
Durante su intervención en la primera Interparlamentaria del PSOE-A tras los comicios regionales de marzo, celebrada este sábado en Córdoba, Griñán ha aclarado que si el Ejecutivo central "lucha por un proyecto de reactivación económica", los socialistas estarán "de acuerdo". Ahora bien, advierte que "si se limita a construir un nuevo proceso de acumulación capitalista basado en la transferencia de rentas de las clases trabajadoras", entonces, agrega, "nos opondremos, porque sabemos que así no se sale de la crisis y lo único que se hace es empobrecer a la mayoría de la población".
En este sentido, lamenta que "día a día se ve una subordinación de la política a los mercados", además del "mensaje peyorativo que día a día transmite la derecha", como por ejemplo cita la propuesta de rebaja de sueldos anunciada por la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal.
Al respecto, el presidente de la Junta afirma que "en lo económico se vive una situación, donde parece todo hecho y ha llevado a poner en riesgo consensos institucionales", y ante ello asegura que el PSOE-A es "un partido de gobierno" y lo primero que tiene que hacer es "definir el proyecto constructivo, con cohesión interna y voluntad decidida de conocer tendencias actuales".
A su juicio, "para salir de la crisis no es necesario romper la cohesión europea, ni quebrar el estado de las autonomías", al tiempo que agrega que la labor de los socialistas andaluces con representación en las distintas cámaras es "algo más que un protesta", pues, "no podemos reducir nuestra política a una protesta", sino que sea "una alternativa que concite a muchos en la creación de empleo y la conservación de los derechos civiles, sociales y laborales que con el Gobierno del PP se han perdido o están en riesgo de perderse".
PROGRAMA DE REACTIVACIÓN ECONÓMICA EN EUROPA
Entretanto, Griñán apunta que "hoy la cohesión en Europa está debilitada", y ante esta situación cree que "debe dirigirse un gran programa de reactivación económica de Europa que tenga en cuenta las ventajas de cada región o país". Y es que, declara que "el problema es no es una décima del déficit, sino que el problema es el paro".
De este modo, afirma que se debe "empezar a concluir que las políticas contra la crisis que se hacen en Europa y España no dan resultados", a lo que se une que "los países rescatados están de desastre y son lo que peor van", pues, "el rescate ha supuesto menos crecimiento económico y más desempleo".
DEFINIR LA CARTERA BÁSICA CONSTITUCIONAL
Además, considera que "lo peor de cualquier argumento es negarse a analizar los resultados", donde "subordinar toda la política económica a la reducción del gasto público supone menos crecimiento y más desempleo", y eso, como señala Griñán, "no reduce el déficit".
Asimismo, recrimina que "el primer rescate no lo hemos pedido para rescatar a la sanidad y la educación, lo hemos pedido para rescatar a las entidades financieras", y dicho rescate "significa perjuicio para las víctimas de la crisis". Por todo ello, el presidente de la Junta cree "necesario" definir en España "la cartera básica constitucional", de modo que se fortalezca "el lazo social anudado" hace unos 30 años, conseguido en el proceso constitucional de 1978.
LUCHA POR LA SANIDAD PÚBLICA
En otro orden de cosas, el secretario general del PSOE-A advierte que "el problema fundamental" en la sanidad, es que "el Gobierno ha roto la cobertura universal, ahora son inmigrantes ilegales, luego los parados y después los estudiantes", ese es "el problema", que, en palabras de Griñán, "desembocará en una sanidad que sea buena para que el puede pagarla y una beneficencia para el resto".
Frente a ello, el PSOE-A tiene que "explicar cuál es el modelo sanitario" por el que apuesta, con "una sanidad pública, universal, que investiga, protege la salud, previene la enfermedad y presta atención medica especializada y lo hace sin exclusiones de ningún tipo".
Así, señala que "no se ahorra privatizando hospitales", y en cambio cree que "hay que seguir con subastas de medicamentos, pese a que la han recurrido, y mantener el modelo y explicar cómo lo hacemos posible y viable", además de "adaptarlo a las nuevas circunstancias".