Asegura la gente que está relativamente cerca de Marcelo Bielsa, que el argentino responde perfectamente al apodo de loco que le acompaña por donde va. La pregunta en Sevilla es si el exseleccionador chileno está más o menos cuerdo que un técnico que asegura que tiene potencial de sobra su plantilla para pelear por el tercer puesto, que sólo le hace falta un delantero rápido para retocar un gran plantel y que su equipo ha ganado en solvencia defensiva, entra otras apreciaciones y decisiones que ha dicho o tomado el cuerdísimo Marcelino García Toral.

El Sevilla lleva ya cinco partidos sin ganar, ha perdido dos de esos encuentros, los dos en casa, y no juega un pimiento. No se sostiene lo que se ve y lo que se vende. Hay poquísimo pollo para este arroz y eso que ante el Athletic volvían gente como Kabnouté, Negredo o Perotti, los dos primeros fundamentales, y el tercero, añorado no se sabe bien por qué.

Pero el Athletic se paseó por Nervión casi sin despeinarse, aunque a toda velocidad. Mientras que en el Sevilla nadie sabe jugar en equipo, en el fútbol combinativo tan necesario para someter al rival en los encuentros, el Athletic sí que tiene mecanizado lo suyo y no renuncia a ganar por la vía del buen juego, algo lógico por otro lado.

El Athletic fue mejor que el Sevilla especialmente en la segunda mitad, aunque en la primera, pese a los errores de ambos, que costaron dos goles, también se le vio mucho más suelto. La cosa se pone fea para Marcelino, que realmente está superado por los acontecimientos.

FICHA TÉCNICA
SEVILLA FC (1): Javi Varas; Cáceres, Spahic, Escudé, Fernando Navarro; Navas, Fazio, Trochowski (Rakitic, 67), Perotti (Armenteros, 72); Kanouté y Negredo (Manu del Moral, 64).
ATHLETIC CLUB (2): Iraizoz; Iraola, San José, Javi Martínez, Aurtenetxe, De Marcos; Íñigo Pérez (Ramalho, 87); Susaeta (Gabilondo, 67), Ander Herrera, Muniain; y Llorente (Toquero, 89).
Goles: 0-1: Min. 6, Iraola. 1-1: Min. 14, Navas. 1-2: Min. 71, De Marcos.
Árbitro: Ayza Gámez, valenciano. Amonestó a los locales Fernando Navarro y Spahic; y a los visitantes De Marcos y San José.