Frente por frente al Centro Comercial la Asunción, en la barriada jerezana del mismo nombre, me descubren un bar del que no tenía noticias.
La Ermita está especializado en desayunos y tapas variadas. Pero lo traigo aquí a colación por lo primero. Y más concretamente por los desayunos con pringá, la gran olvidada de la hostelería local.
Después del cierre del mítico bar Volapié, cuyo local se encuentra a menos de cien metros a la espera de que alguien lo resucite, sólo la taberna de Mariamanuela, en las inmediaciones de Chapín, en la venta Gabriel y en la venta El Pollo, sirven esta suerte de desayuno tan aclamado como incomprensiblemente descartado.
En La Ermita elaboran a diario la pringá y la ofrecen en rebanada, mollete, bollo o panecillo. Ni con la carne entera ni triturada, la presentan sobre el pan tostado cortada finita y con todo lo que debe llevar: tocino de papada, jarrete, cabecero de lolo, chorizo, morcilla...
Una vez encerrada en el pan caliente, el conjunto empieza a fundirse y a impregnar el bollo en este caso de los jugos, predominando el color de la manteca con el pimentón.
Completísimo bocadillo por sólo 3,50 que alegra la jornada a cualquiera con lo que se ponga por delante.
DIRECCIÓN: Bar La Ermita. Calle las Palomas, 2. 11406 Jerez de la Frontera (Cádiz)
