Lluvia, nieve, viento y temporal marítimo protagonizarán este fin de semana de marzo que, en palabras del portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), Rubén del Campo, estará marcado por un "tiempo invernal" por la presencia de una borrasca que "va a dar lugar a un episodio de tiempo adverso".
De este modo, se espera que haya precipitaciones "generalizadas y abundantes" mientras que la nieve hará "acto de presencia no sólo en zonas de montaña, sino también en áreas más bajas". "Y aunque el viento no sea el factor más adverso, también va a provocar mal estado de la mar y va a soplar con intensidad, incrementando la sensación de tiempo desapacible", ha precisado Del Campo.
El portavoz ha señalado que este viernes habrá lluvias generalizadas, que serán más abundantes en el oeste y centro del país, así como en puntos de Aragón y de Cataluña, que no afectarán al extremo sureste y, en caso de hacerlo, será en forma de chubascos o precipitaciones débiles.
En Baleares, se esperan nevadas copiosas en las montañas del norte y de la zona del centro, con acumulaciones de diez a veinte centímetros de nieve nueva. También nevará, con menos acumulados, en zonas llanas, con una cota que se situará en torno a unos 700 a 1.000 metros en el norte, de 1.000 a 1.200 metros en el centro y en el sur, aunque en esta última zona subirá a unos 1.400 metros.
Las temperaturas bajarán, sobre todo las diurnas, y en zonas del interior apenas se llegará a los 10 o 12 grados centígrados (ºC), lo que, junto al viento que soplará con fuerza, "incrementará la sensación de frío", en palabras de Del Campo, que ha añadido que se esperan rachas que podrán superar los 70 kilómetros por hora (km/h) en la meseta norte, con rachas más fuertes en las montañas y en zonas costeras del norte.
Para el sábado, la borrasca se situará en el Golfo de Vizcaya y será una jornada de precipitaciones que podrán caer en prácticamente cualquier punto de la Península y Baleares, aunque con menor intensidad en puntos del Levante y del Cantábrico oriental.
El portavoz ha indicado que las lluvias más abundantes, que además posiblemente estarán acompañadas de tormenta, se producirán en el oeste y centro de la Península, así como en Andalucía, este de Castilla-La Mancha, extremo sur de Aragón y área pirenaica. Mientras, las rachas de viento serán intensas y podrán alcanzar los 80 km/h en áreas litorales del norte y en montañas.
También en montañas podrán acumularse entre 10 y 20 centímetros de nieve nueva y fuera de las áreas montañosas también nevará. La cota podrá bajar en el noroeste de la Península hasta unos 600 metros en el noroeste, entre 800 y 1.000 metros en el resto de la mitad norte y zona centro y hasta unos 1.000-1.200 metros en la mitad sur de la Península.
Las temperaturas diurnas "bajarán un poco más", aunque las heladas quedarán restringidas a zonas de montaña. "Será un día frío", ha resumido el portavoz, para quien este descenso de las temperaturas "va a dejar un ambiente frío para la época del año, especialmente en las temperaturas diurnas, que en muchos puntos del interior peninsular estarán entre 5 y 10ºC por debajo de lo normal para esta época del año.
También ha destacado que el temporal marítimo será importante en la comunidad gallega durante el fin de semana ya que el oleaje en Galicia, tanto el sábado como en la jornada anterior, podrá alcanzar alturas superiores a los siete metros.
El domingo continuará la influencia de esta borrasca, aunque el portavoz ha precisado que se irá debilitando y habrá "lluvias generalizadas ya menos abundantes que en días anteriores". Los mayores acumulados se darán en el Cantábrico, mientras que en el Levante y Baleares apenas lloverá.
Seguirá nevando en las montañas, sobre todo en las del centro y norte, con una cota de nieve que subirá desde los 900 metros al principio del día en la mitad norte y zona centro hasta unos 1.000 a 1.400 metros, igual que en la mitad sur, donde en las horas centrales del día subirán las temperaturas.
En este sentido, los termómetros van a subir el domingo en buena parte del país, aunque continuará el ambiente frío para la época del año en el interior. No obstante, a orillas del Mediterráneo, se superarán ya los 18 o 20ºC de temperatura máxima.
En cuanto a Canarias, de cara al fin de semana, se esperan vientos de componente norte con cielos nubosos, especialmente en el norte de las islas de mayor relieve y lluvias débiles en general. En esa zona bajarán las temperaturas.
ESTABILIDAD PARA LA PRÓXIMA SEMANA Y AUMENTO DE LAS TEMPERATURAS
Para los primeros días de la próxima semana, la tendencia es que "el tiempo se vaya estabilizando", según el portavoz, "con menos nubes y también menos lluvias". Aunque todavía lloverá el lunes en zonas del norte, con nevadas por encima de 1.000 a 1.2000 metros, el martes ha señalado que será una jornada "más estable, más tranquila".
No obstante, ha avanzado que el miércoles nuevas borrascas atlánticas llegarán al país, que dejarán lluvias más abundantes en el oeste y zona centro, aunque de nuevo estas precipitaciones serán menos probables en el Mediterráneo.
Las temperaturas en general subirán a lo largo de la semana para alcanzar valores normales y después, de cara al próximo fin de semana, "probablemente temperaturas más altas de lo habitual para la época", según Del Campo.
FEBRERO CÁLIDO Y SIN LLUVIAS
Por otro lado, el portavoz ha detallado que el pasado mes de febrero fue el tercer febrero más cálido de la serie histórica, sólo por detrás de los de 2020 y 1990, con temperaturas que estuvieron en todo el país por encima de lo normal y que superaron en 2,5ºC el valor normal del mes de febrero para el conjunto de España.
Aunque en algunas áreas del centro, este y norte de la Península las temperaturas estuvieron unos 3ºC por encima de lo normal y hasta 4ºC por encima del valor promedio habitual, destacan las altas temperaturas de Canarias. En este sentido, el archipiélago vivió el febrero más cálido de la serie histórica, que arranca en 1961.
En cuanto a las lluvias, fue un mes lluvioso y, en el conjunto de la España peninsular, estas precipitaciones alcanzaron un valor de 70 l/m2, lo que supone un 135% más de lo normal. Las precipitaciones superaron su valor normal en casi todo el país, con la excepción notable del área mediterránea, donde fue un mes muy seco y en algunos puntos del sureste prácticamente no se registraron precipitaciones.
Lo mismo sucedió en Canarias, con un mes muy seco, y en el sur del archipiélago tampoco llovió a lo largo del mes de febrero.