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El Racing entra sin remisión en la UCI

Dos penaltis sin señalar ayudaron a que los rojiblancos diera un paso atrás en sus aspiraciones de mantener la categoría, sumando su tercera jornada sin ver puerta y la tercera derrota consecutiva

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  • La desolación y decepción hicieron acto de presencia tras el segundo gol.
Con muchas urgencias acudía el Racing Portuense a la cita de ayer domingo. La primera final consiguieron saldarla de la peor de las maneras posibles al no sumar nada positivo ante el filial cadista. Este Racing se empeña en complicarse la existencia en la categoría al caer cuando menos se preveía sumando la enésima decepción de la temporada. Ahora quedan cuatro finalísimas más que deberán de afrontarla con las mismas intenciones y las mismas ganas que derrocharon en la tarde de ayer, aunque con una mejor suerte.
El camino aún no ha terminado pero el peregrinar por la Tercera División sumó en la tarde de ayer un capítulo peligroso poniendo más que nunca la permanencia en duda y mirando de reojo la peligrosa Primera Andaluza que acecha el cogote con la presión que eso supone. El objetivo semanas atrás era abandonar el puesto que antecede los puestos de descenso directo aunque la realidad es bien distinta y lo menos malo será conseguir la décimo séptima posición.
Mucho tendrá que cambiar para que el futuro empiece a vislumbrarse de un tono más claro. El sufrimiento y la agonía serán sinónimos en este tramo final desgraciadamente. Y es que cuando las cosas van mal aún se puede poner peor.
Tras las dos derrotas consecutivas ante Coria y Los Palacios hicieron encender todas las alarmas y la preocupación en el seno racinguista que veía mucho más cerca el infierno de un segundo descenso consecutivo. La derrota sumó más preocupación tras tres jornadas sin ver puerta de ahí que dejara un silencio sepulcral en el José del Cuvillo sabedor que en estas cuatro jornadas tocará más que nunca sufrir. El descenso está más cerca que nunca y la dudas acerca de lo que pudiera derivar esto se antoja de imprevisibles consecuencias para la entidad.
La semana que se fue resultó complicada y esta que empieza resultará más aún aumentando la lógica preocupación.

Intención sin premio
 
Antes de comenzar el encuentro en los corrillos previos, los aficionados hacían cábalas de cuantas victorias le hacían falta a los portuenses para certificar la tan añorada permanencia en una Liga que se ha hecho eterna y de la que aún resta un mes, clave, por disputar. Los lógicos comentarios iban destinado a la victoria del Sanluqueño ante una Balona que empieza a desinflarse y que no hacían sino hacer más obligatoria la victoria de ayer.
Todo ello unido a la sorprendente derrota del Mairena ante Los Palacios que venció por la mínima en la matinal dominical. Es por tanto, que la tarde con todos los resultados ya disputados metía más presión si cabe a los jugadores. Los de Manzano empezaron con llegadas al área visitante que aunque no muy peligrosas, si insintentemente por mediación de José Antonio por banda derecha. A éste se le sumaba el lateral chiclanero Fran Melli que lo intentaba. Así, Toboso ayer titular por primera vez como local, la tuvo en el 23’ pero su disparo dentro del área pequeña salió por encima del portal defendido por Ricardo.
El Cádiz B que llegaba a la cita después de una semana convulsa por la expulsión de tres de los suyos y con Tiri apartado del equipo, tuvo que ver como con jugadores del Balón tuvo que completar la convocatoria tras las tres sancionados que acumulaban.
Eso no hizo sino adormecerlos en su parcela a la espera de una contra que inquietara el portal de Paredes. Los de Ángel Oliva sin prisas sabían que el cronómetro finalmente iría de su parte y sólo tendrían que esperar su oportunidad.
Hasta la media hora de juego, los locales se mostraron superiores llevando la iniciativa aunque esta resultaría insuficiente para batir el portal amarillo. Así, en el 26’ tras una falta a José Antonio y botada por el capitán portuense Lolo Prado, Abel Calatayud lo intenta en el segundo palo sin demasiada suerte.

Jugada clave

Nuevamente lo intentaría el central Mere que tendría la ocasión más clara de inaugurar el marcador tras un saque de córner, pero la fortuna no quiso estar ayer del lado rojiblanco y por enésima vez y al igual que el pasado miércoles ante los palaciegos, el balón decidió no entrar. Eso sería en el minuto 33’ y lo que pudo ser el 1-0 se convertiría un minuto más tarde en la jugada decisiva tras la expulsión del jerezano Juanca que vería la roja directa.
La jugada no podría ser más antagónica para ambos contendientes. El Racing se quedaba con uno menos y el Cádiz B con uno más adelantándose tras el gol de falta del canterano Migue, que se convirtió en el mejor de los gaditanos con diferencia.
Una hora por delante con 0-1 y con un jugador menos, el Racing estaba llamado hacer la épica. Pero lo que no puede ser no puede ser y además es imposible. Acto seguido David Toboso sería derribado dentro del área y ante las protestas generalizada Fernández Delgado prefirió obviar lo evidente y con una sibilina frialdad dejó sin señalar un penalti tan claro como clamoroso.
Detalles que marcan que el partido no sería nada fácil. Mal empezaban a ponerse las cosas para un equipo que empezó acusar la presión con el paso de los minutos. Los cadistas mientras tanto, se mostraban espectadores de una historia que poco o nada le iban a sus intereses llegando con esto al descanso de la tragicomedia.
Nada más reanudarse el partido, José Antonio tendría su oportunidad pero el meta gaditano se emplearía a fondo evitando el empate. Minutos más tarde y tras la entrada de Alberto es derribado dentro del área que el trencilla sevillano saca fuera para desesperación del respetable. Las protestas resultarían en vano. El peligro racinguista únicamente llegaba una y otra vez llevado a balón parado.
Y cuando todos buscaban con más corazón que cabeza, llegó la sentencia por mediación de Amarilla que anotaría el definitivo 0-2 ante la desolación de todos.

Manzano: “Espero que la Federación vele por la limpieza”

El técnico del Racing Portuense con cara de circunstancias atendía a los medios una vez acabado el partido. “No está siendo el fútbol justo con nosotros. El equipo lo dio todo pero no tuvimos la cabeza fría”. A pesar de la derrota, Manzano reconoció que “no puedo reprocharles nada a mis jugadores”. Conocida la totalidad de la jornada antes de disputar el choque “no nos benefició”. Apuntaba ante la suspensión del encuentro de Los Barrios y el Murallas de Ceuta “que la Federación vele por la limpieza de la competición”. Las suspicacias a la hora de la disputa del choque irá creciendo según avance aún más la Liga. De entre los implicados también el Sanluqueño deberá jugar ante el Mairena el 23 de abril.
Por su parte, Ángel Oliva admitió “lo complicado que lo tiene (el Racing) aunque con opciones si son capaces de ganar aquí al Dos Hermanas y consiguen puntuar fuera”. Valoró el partido realizado por Migue.

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