Un pasodoble a la madre es un bonito tributo a sus esfuerzos, estando en un presidio
De fondo la Penitensiaría ahersireña. Ellos salen de allí, por fin libres. Presentación. Salen reinsertados y con formación. Un pasodoble a la madre es un bonito tributo a sus esfuerzos, estando en un presidio. Fuerza y genio en sus voces. La Ley del Menor “salvaguarda todos sus errores”, según dicen en el segundo pasodoble. Aplaudida esta letra. El público se anima. Acertados los cuplés, aunque le hubiese hecho falta un poco más de ingenio. Pasables. El estribillo iguala sus circunstancias con las de Zapatero. Sin diferencia, insinúan. Músicas de los Chichos para el popurrí, muy bueno. Aplausos.
Lo mejor La chirigota tiene buen plantel en el escenario. Mucho tipo y buen papel, a pesar de la hora.
Lo peor
El tipo también es de calle, pero mejor conseguido que otros. Tampoco es cosa de modificar.
El público
Ya se calentó algo más. Cuando aparece una buena agrupación se agradece y demuestra con efusividad desde el teatro.
