La consejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, Carmen Crespo, ha asegurado este jueves que el Gobierno central está "poniendo chinitas" al "legítimo" trasvase Tajo-Segura, que afecta a unas 24.000 hectáreas de cultivo del norte de la provincia de Almería, al entender que la limitación de las transferencias obedecen a una "decisión exclusiva" de la ministra para la Transición Ecológica sin atender a criterios técnicos.
Así lo ha manifestado la consejera en respuesta a una pregunta oral formulada por el diputado autonómico Pablo Venzal (PP) en la sesión plenaria del Parlamento andaluz, donde la consejera ha insistido en que las limitaciones a los trasvases incrementan los costes de producción de los agricultores, que consumen agua desalada y se ven afectados por la falta de precipitaciones.
"El Gobierno de Andalucía cree en las transferencias y en los trasvases, porque es una cuestión de solidaridad con el agua entre territorios", ha indicado la titular andaluza de Agricultura, quien cree que el Ejecutivo centra trata de que los trasvases vayan "decayendo".
Crespo, quien ha recordado que la Audiencia Nacional ha admitido a trámite los recursos elevados por los gobiernos autonómicos de Andalucía, Región de Murcia y Comunidad Valenciana por esta cuestión, ha incidido en que la comisión técnica que "decide los trasvases" habrían respaldado las transferencias, por lo que la decisión de no hacerlo es "arbitraria y no está basada en la decisión de los técnicos".
"En noviembre podría haberse transferido 19,2 hectómetros y en diciembre 14,7, y la ministra, por decisión suya exclusiva, solo transfirió 7,5 hectómetros", ha explicado tras criticar que, con estas medidas, se están "cercenando" los derechos de los agricultores del norte de la provincia.