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Almería

Condenado un médico por abuso y acoso sexual a una auxiliar de enfermería durante tres años

La sentencia dictada por la Sección Segunda, a la que ha tenido acceso Europa Press, confirma la pena impuesta en primera instancia por el Juzgado de lo Penal número 5 de Almería

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La Audiencia Provincial de Almería ha condenado a un médico anestesista de 63 años por un delito de abuso sexual y otro de acoso sexual hacía una auxiliar de enfermería a la que sometió a continuos "tocamientos" de índole lasciva que se produjeron durante el periodo en el que trabajaron junto al menos tres años en un centro hospitalario de la capital.

   La sentencia dictada por la Sección Segunda, a la que ha tenido acceso Europa Press, confirma la pena impuesta en primera instancia por el Juzgado de lo Penal número 5 de Almería, que condena al facultativo a 21 meses de multa a razón de 12 euros al día como autor de un delito continuado de abuso sexual y otra multa de 10 meses con una cuota al día de 12 euros por un delito de acoso sexual. Asimismo, deberá indemnizar a la víctima con 6.000 euros por los daños morales infringidos.

   En este sentido, el tribunal rechaza el recurso de apelación elevado por las partes, sentido en el que la defensa del doctor solicitaba su libre absolución al entender que se había vulnerado su presunción de inocencia, por lo que cuestiona la imparcialidad del juez. Subsidiariamente, también solicitó que se anulara y repitiera el juicio, lo que llama "poderosamente" la atención del tribunal, que le cuestiona que trate de ver "válido el juicio para la absolución" pero "nulo" si la Sala confirma la sentencia de instancia.

   Por otro lado, también descarta la petición pretendida por la acusación particular, que se adhirió parcialmente al recurso de apelación a fin de aumentar el importe de las multas o, en su caso, conseguir una orden de alejamiento de 500 metros del médico hacia la enfermera. La Audiencia recuerda que la apelación "no es la vía adecuada para conseguir una modificación de la pena" ni para introducir cuestiones 'ex novo' no tratada con anterioridad.

   Según considera probado el juez, entre septiembre de 2009 y septiembre de 2011, el médico la "tocaba llegando a hacerle proposiciones sexuales y amenazándola con perder su trabajo si no accedía a ello" en especial "en los momentos en los que estaban solos" y ella "no podía defenderse". Así, destaca que la auxiliar y el acusado "compartían habitualmente quirófano".

   En concreto, el fallo detalla que, en "diversas ocasiones y sobre todo cuando coincidían en el quirófano, la besaba en el cuello y en los labios, la abrazaba por detrás mientras que ella tenía las manos ocupadas y no podía evitarlo", le "restregaba los órganos genitales contra el trasero, metía la mano por el escote para tocarle el pecho en numerosas ocasiones, llegando a hacerlo alguna vez por debajo de la ropa".

   El juez remarca que lo hizo "sin que ella accediera" y subraya que se "lo quitaba de encima en cuanto podía de un codazo o golpeándole en la pierna" al tiempo que destaca que el condenado se "aprovechaba de la relación de trabajo de ambos, de su condición profesional y del temor de ella a ser despedida si se negaba".

LA AMENAZÓ CON PERDER SU EMPLEO

   En esta línea, resultó acreditado que le dijo que "podía perder su empleo" si no accedía a sus proposiciones y que se dirigía a ella con expresiones impropias y vejatorias.

   La sentencia recoge que la víctima sufrió como consecuencia de estos hechos una "situación anímica precaria" con ansiedad alta y depresión moderada debido "a la situación estresante y humillante que tuvo que soportar" durante tres años y señala que ella no se atrevió a denuncia "por vergüenza y por temor a ser despedida".

   "Cuando no pudo soportar más la situación, procedió a denunciar los hechos ante la Comisaría Provincial de la Policía Nacional en Almería", remarca la sentencia.

   El titular del Juzgado de lo Penal número 5 consideró la declaración "sincera, persistente y contundente" de la víctima, en quien apreció "la indignación propia de quien ha sido objeto de los hechos denunciados y de una situación hostil", y en su testimonio detallado coincidente con el que prestó en instrucción "sin móviles espúreos y sin lagunas o contradicciones que les resten valor".

   Alude, asimismo, a tres testificales de compañeros de trabajo que aseguraron haber visto los tocamientos y al informe de la perito forense que certificó que presentaba una sintomatología "compatible con la de haber sido víctima de acoso".

   Por contra, con respecto a la declaración del acusado, señala que sus alegaciones "no convencen en modo alguno", no resulta "creíble en absoluto" y que los "simples rumores sobre una supuesta relación sentimental entre ambos no le otorgan carta de naturaleza a la misma".

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