La Fiscalía de Almería va a solicitar 13 años de prisión para un hombre de 42 años y natural de Gambia acusado de acabar con la vida de un compatriota tras propinarle una puñalada con un cuchillo en el tórax en Cuevas del Almanzora (Almería) en el transcurso de una discusión.
El detenido, que será juzgado a través de un tribunal con jurado, está acusado de un delito de homicidio por el que además ha pedido una medida de libertad vigilada de diez años, toda vez que interesa también su expulsión del territorio nacional durante diez años una vez tenga acceso al tercer grado o cuando haya cumplido la tres cuartas partes de la condena impuesta.
Según el relato del fiscal, consultado por Europa Press, los hechos tuvieron lugar sobre las 14,45 horas del 16 de diciembre de 2020 cuando supuestamente el acusado y la víctima entablaron una discusión en la calle Cuesta de Calvario, próxima al Castillo del Marqués de los Vélez.
Fue ahí donde, según la acusación del Ministerio Público, el acusado "clavó un cuchillo monocorte, puntiagudo y con un ancho de hoja hasta donde penetró, de al menos 18 centímetros" en el pecho y en el brazo, al tiempo que le habría golpeado con un "objeto contundente tipo palo o barra".
La victima presentaba varias heridas por cortes y punzadas en la cara, la axila y el brazo izquierdo, toda vez que mostraba una herida penetrante en el costado izquierdo "mortal de necesidad" y otra más que afectó al pulmón izquierdo, siendo esta de "riesgo vital".
El fallecido, que carecía de familiares en el territorio nacional, murió debido a un "shock cardiogénico o taponamiento cardiaco", esto es, una "herida cardiaca por arma blanca" con un cuchillo que no fue localizado, aunque sí lo fue un palo de madera que se habría empleado en el ataque.
La defensa del único encausado por el crimen ejercida por el letrado Eduardo Muñoz Simó tiene previsto solicitar la libre absolución para su patrocinado al entender que, si bien mantuvieron una discusión "verbal" el día de los hechos, "no hubo ningún tipo de agresión física" entre ambos, de modo que el acusado se marchó del lugar hasta que "escuchó chillar" a la víctima y "pedir ayuda".
Así, sostiene que cuando acudió al lugar en el que se encontraba halló a la víctima "tendido en el suelo" con "abundante sangre" en los alrededores del cuerpo y un "palo de madera redondo" con un extremo "manchado de sangre". Del mismo modo, mantiene que otras tres personas se personaron segundos después al lugar donde se encontraba el cuerpo, quienes han "prestado declaraciones contradictorias entre sí" sin que ninguno de ellos, según la defensa, llegara a ver al acusado "apuñalar" a la víctima.
En esta línea, la defensa abunda en que aunque la Policía Local detuvo en las inmediaciones del cuerpo al acusado, no se llegó a encontrar en su poder cuchillo alguno, toda vez que él tampoco habría confesado el crimen. El juicio, para el que se han previsto cuatro sesiones, tiene previsto arrancar el 24 de octubre en la Audiencia Provincial de Almería, donde este jueves se sortearán los miembros del jurado.