Carolina Marín reina en la India. El 30 por ciento de sus 433.000 seguidores en Instagram son indios; el 25 por ciento son españoles, ocupan la segunda plaza. Y los indonesios, los terceros en el ránking de admiración. Juega en Delhi estos días, en su casa, como si estuviera en Huelva, su ciudad natal.
"A cualquier parte que voy, todo el mundo me reconoce en este país", admitió a EFE Marín en una entrevista en Nueva Delhi, donde se mostró asombrada por el cariño que esta nación le brinda a pesar de que en los Juegos de Río 2016 se impuso ante la india Pusarla Sindhu, su eterna rival, en su lucha por el oro olímpico.
"Fue algo que me sorprendió muy gratamente. Me recibieron con una admiración y un gran cariño que no me lo imaginaba porque, entre comillas, le he quitado el oro (a Sindhu). Me siento agradecida porque muchas veces, incluso cuando voy al pabellón y compito, me siento como si estuviera en mi propia casa", remarcó.
Con sus triunfos, la vigente campeona europea de bádminton ha logrado, además, lo que parece imposible para los deportistas de élite que nada tienen que ver con el fútbol o el baloncesto: que algunas de las marcas más potentes de España quieran un hueco de su equipación.
Carolina Marín se ha construido su propio estante en el escaparate de mejores deportistas de la historia de España por sobresalir en un deporte no de masas, pero emergente en el país, que le ha permitido lucir patrocinadores españoles por Asia, donde el bádminton se considera un deporte rey, y ella, una de sus reinas.
La campeona olímpica no solo logró con su espectacular palmarés darle un espacio a este deporte en la agenda deportiva española, sino que también ha ganado una gran popularidad en un país como la India, que idolatra a su gente cuando traspasa la barrera del éxito mundial.
La equipación que viste Marín en el Abierto de la India de esta semana lleva el patrocinio de Movistar, Santander, LaLiga e Iberdrola, además de Yonex, el sello japonés por excelencia de equipación para bádminton.
"Carolina, a nivel empresarial, ha supuesto un interés muy grande por parte de las empresas españolas", señaló a EFE el jefe de comunicación de Carolina Marín, Ignacio Paramio.
Marcas de gran recorrido internacional, como PlayStation, Toyota, Sony, o Amazon, entre otras, también se han subido al carro de un patrocinio que no se limita únicamente a llevar el logo de la marca, sino también a participar en anuncios y campañas de publicidad.
"Compartimos los mismos valores, que eso para mí es fundamental, y yo creo que esto es un trabajo en equipo. Ellos utilizan mi imagen sobre todo aquí, en Asia, que es donde tengo mi imagen más potente, y a la vez tengo el respaldo de patrocinadores españoles y estoy patrocinando esa marca España", afirma Marín.
EL VALOR AÑADIDO: LA PROPIA CAROLINA
Pero, además de exposición internacional, ¿qué tiene esta deportista para que las marcas españolas confíen en ella? La propia Carolina Marín, "un perfil muy específico" por los valores que transmite, apunta Paramio.
La historia de esta campeona olímpica y tres veces mundial de una disciplina que solo supone el 0,2% de las licencias deportivas en España "provoca que, ya sean las marcas o incluso los aficionados, aunque no sean del bádminton, se puedan identificar con ella", subrayó.
"El trabajo, el esfuerzo, la resiliencia en la lucha, al mismo tiempo, la paciencia con las lesiones. Desde luego que son valores que no solamente pertenecen a Carolina, por supuesto, pero quizás Carolina sí ha sabido transmitirlos durante mucho tiempo de una manera muy especial", precisó.
MARCAS ESPAÑOLAS CON 'ME GUSTA' DE LA INDIA
Que Marín sea española no deja de resultar "exótico" para los seguidores del bádminton, que se concentran mayoritariamente en Asia, y eso provoca que genere mucha atracción, ya que "existen ciertas similitudes culturales", sobre todo con la India e Indonesia, explicó Paramio.
De hecho, el gigante asiático representa más del 30 % de los 433.000 seguidores que amasa Marín en Instagram, superando a los españoles, que se encuentran en segundo lugar, seguido de los indonesios. El país asiático le ofreció incluso participar en una película sobre la badmintonista india Saina Nehwal, bronce en Londres 2012.
"Es una diferencia muy grande porque aquí es una magnificación, es un deporte rey que está presente en televisión, en medios de comunicación (...) y en España eso nos cuesta un poco más. Sí que es cierto que a través de los grandes títulos que he conseguido se ha hecho voz de ello, pero comparándolo con la India queda todavía mucho por hacer", sentenció Marín.