Representantes de los trabajadores del parque de atracciones Tívoli, afectados actualmente por un ERTE, el alcalde de Benalmádena, Víctor Navas; y el concejal de Servicios Operativos, Salvador Rodríguez, se han reunido esta mañana en la sede del Gobierno andaluz en Málaga con la delegada del Gobierno andaluz en Málaga, Patricia Navarro; y la delegada territorial de Empleo, Carmen Sánchez, para solicitar apoyo institucional ante un posible cierre.
En el encuentro, el alcalde ha reafirmado el apoyo del equipo de gobierno “a la continuidad de Tívoli, tanto por su importancia como reclamo turístico y motor generador de riqueza y empleo, como su carácter icónico para Benalmádena y la Costa del Sol”.
Además, Navas ha recordado que los informes del administrador concursal “han vuelto a demostrar la viabilidad económica del parque”.
El alcalde ha informado durante el encuentro que ha trasladado a la gerencia del Grupo Inmobiliario Tremón, actual propietario de Tívoli, “la importancia y urgencia de que emita un mensaje de tranquilidad a trabajadores y ciudadanía, en el que asegure la continuidad de la actividad del parque este verano”.
La delegada del Gobierno andaluz confía en que el histórico parque de atracciones y espectáculos Tívoli World abra sus puertas este verano.
Navarro ha manifestado su respaldo, tanto al mantenimiento del empleo como al funcionamiento de este parque temático con medio siglo de historia en la Costa del Sol.
La apertura del Tívoli es una pieza clave en la recuperación económica de la localidad costasoleña y de la propia provincia, ligada como está al sector servicios y turístico de la Málaga, “uno de los que más ha sufrido en el último año”, ha recordado la delegada.
La situación actual, marcada por un descenso de los contagios, un incremento y agilidad en la administración de las vacunas y el próximo fin del estado de alarma hacen prever un verano “con mayores cotas de normalidad en términos económicos y turísticos, y en esa normalidad entra también este equipamiento”, ha valorado Navarro.
Para la Junta de Andalucía, esta infraestructura es un “reclamo” para los visitantes, forma parte de la oferta turística de la provincia y contribuye a paliar la crisis generada por la pandemia.