Antonio Fernández Montoya, El Farru, vuelve a Sevilla con el espectáculo “Farrucos y Fernández. Navidad en Familia IV”.
La cita el día 19 de diciembre en Cartuja Center Cite.
El Farru es reconocido internacionalmente, ha colaborado con grandes artistas como Beyoncé, Björk, Marc Anthony, Paulina Rubio, Madonna, Paco de Lucía, Tomatito o El Barrio, entre otros muchos.
Antonio Fernández Montoya visitó la redacción de Viva Sevilla.
Farrucos y Fernández. Navidad en Familia IV Edición. ¿Qué nos puede contar del espectáculo?
–Es un espectáculo que nace de forma natural, por la necesidad de estar juntos como familia. En la familia hay flamencos profesionales, como mi madre La Farruca, mi hermano Farruquito o El Carpeta, pero también hay flamencos del alma, y he conseguido juntarlos, a los Farrucos y a los Fernández. No estaba pensado como espectáculo para girar, sino más bien para estar juntos y compartir como familia. El primer año hicimos uno solo, aquí en Sevilla, el segundo hicimos 3, el tercero 8 y para esta cuarta edición haremos sobre 19. Esto se hace fundamentalmente para lanzar un mensaje de unión familiar, de cariño, de humanidad y de paz. Usamos la Navidad, casi como excusa.
¿Quiénes participan?
–Participa toda la familia, los Farrucos y los Fernández. Desde el mayor hasta el más pequeño.
¿Hay diferencias entre las anteriores entregas y esta cuarta?
–Cambia todos los años, incluso el espectáculo de un mismo año cambia de una actuación a otra, hay mucho de improvisación. La familia se muestra tal y como es, sin coreografías.
¿Qué significa la navidad para un gitano?
–La navidad para un gitano, o mejor dicho, para un buen gitano, debería significar lo mismo que para una buena persona. Es el momento de hacer examen de conciencia, dar gracias, a Dios o a quien sea… y valorar lo que has hecho mal, para el próximo año hacerlo mejor y ayudar a más personas.
Ha paseado su arte por medio mundo. ¿Cómo se entiende el flamenco lejos de España?
–En algunos lugares incluso mejor que aquí. Creo que tengo una explicación. Hay demasiada oferta y no toda tiene la calidad que debería. Se le pone la etiqueta de flamenco a muchas cosas que a lo mejor no deberían llevarla. No basta con ponerse una flor en el pelo y salir al escenario. Te hablaré de mi experiencia en el extranjero. Es alucinante ver cómo llegas a Nueva York y llenas dos días un gran teatro. Detrás hay una gran publicidad y un respeto al trabajo que presentas. Igual luego llegas a España y no es tan fácil que te contraten y que los promotores se vuelquen tanto como lo hacen en el extranjero. Te pondré un ejemplo. Para liderar un ejército hace falta un general que tenga experiencia y conozca perfectamente tratar con soldados y lo que es una guerra. En España, en algunos festivales hay personas al frente que saben mucho de empresa, de números y de marketing, pero saben poco de flamenco. También a nivel político ocurre. En la cultura, hay ministros, consejeros o concejales, que no entienden nada de flamenco. Y no se pude olvidar que el flamenco, y los flamencos, somos embajadores de la cultura española en todo el mundo.
¿Qué mensaje enviaría a los lectores de Viva Sevilla para que acudan el 19 de diciembre al Cartuja Center?
–Les diría que viniesen, les guste el flamenco, la música y la fiesta, o no. Porque el idioma universal es el sentimiento, Y este espectáculo esta creado desde el sentimiento.