La policía surcoreana ha identificado al responsable de los llamados "asesinatos en serie de Hwaseong", un caso que estaba sin resolver desde que conmocionó al país en los años ochenta y que inspiró el filme "Crónica de un asesino en serie" ("Memories of Murder", 2003).
Se cree que el sospechoso está relacionado con al menos tres de los diez asesinatos y violaciones registrados entre 1986 y 1991 en torno a la localidad de Hwaseong (40 kilómetros al sur de Seúl), según informó hoy la división local de la Agencia Nacional de Policía (NPA).
El hombre, identificado por la policía solo por el apellido Lee y como Lee Chun-jae por varios medios locales que citan fuentes próximas a la investigación, tiene 56 años y cumple cadena perpetua en la ciudad de Busan, en el sureste del país, por el asesinato y violación de su cuñada en 1994 en Cheongju (85 kilómetros al sureste de Hwaseong).
La policía dijo que lo identificó después de que se pudieran obtener nuevas muestras de la ropa de las víctimas y de que éstas coincidieran con el ADN del hombre.
Al ser interrogado por la policía tras el hallazgo, Lee ha negado su participación en los crímenes de Hwaseong, según explicó hoy la NPA en rueda de prensa.
Entre septiembre de 1986 y abril de 1991 diez mujeres (incluyendo dos menores de edad y dos mujeres de en torno a los 70 años) fueron violadas y estranguladas hasta la muerte empleando un "modus operandi" similar en las cercanías de Hwaseong.
El caso deparó la mayor operación policial de la historia del país y una lista de sospechosos que llegó a superar las 20.000 personas.
Aunque el último de los delitos prescribió en 2006, la policía asegura que seguirá investigando la posible implicación del sospechoso en el resto de asesinatos de Hwaseong.
Además de varias series de televisión, los crímenes inspiraron una obra de teatro que fue adaptada después a la gran pantalla por el director y guionista surcoreano Bong Joon-ho en 2003 con el título "Crónica de un asesino en serie".
La película de Bong, que con este trabajo ganó la Concha de Plata a la mejor dirección en el Festival de San Sebastián (España), fue la más vista de aquel año en Corea del Sur con más de 5 millones de espectadores y hoy es considerada un filme de culto.
