España organizará antes de la cumbre UE-África, que se celebrará a finales de noviembre en Abiyán (Costa de Marfil), una reunión de líderes de Europa y el continente africano como la que tuvo lugar hoy en París para analizar la eficacia de las medidas ante la crisis migratoria.
Esa reunión, que se convocará para finales de octubre o principios de noviembre en Madrid, fue anunciada en la conferencia de prensa conjunta que ofrecieron hoy en París varios jefes de Estado o de Gobierno de la Unión Europea y de África.
En la capital francesa se dieron cita el jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy; el presidente francés, Emmanuel Macron; la canciller alemana, Angela Merkel; el primer ministro italiano, Paolo Gentiloni; la Alta Representante de la UE para Asuntos Exteriores, Federica Mogherini; y los presidentes de Níger, Issoufo Mahamadou; Chad, Idriss Déby, y del Consejo Presidencial de Libia, Fayez al-Sarraj.
El asunto central de esa reunión, previa a otra también en El Elíseo de los cuatro líderes europeos, fue la forma de hacer frente a la inmigración ilegal y en ella se acordó crear un grupo de trabajo para hacer un seguimiento de la eficacia de las medidas para luchar contra ella.
La reunión de Madrid para hacer ese seguimiento fue anunciada por Mariano Rajoy y a la importancia de la misma se refirieron también Macron y Merkel en rueda de prensa.
Rajoy destacó que la inmigración tiene consecuencias para todo el mundo y ninguna de ellas buena, ya que perjudica tanto a los países de origen como de tránsito y de destino.
A su juicio, impide el desarrollo y hace grandes y fuertes a las bandas que conforman los grupos de crimen organizado que trafican con personas y que tienen contactos continuos con grupos terroristas.
Consideró que se trata de un problema que no se soluciona en un corto plazo de tiempo, pero defendió dar pasos en la buena dirección.
Para Rajoy, los objetivos son claros y entre ellos se encuentra evitar que haya personas que pierdan la vida al intentar emigrar a otro país, eliminar a las mafias que trafican con personas y luego apoyan a grupos terroristas, generar desarrollo y cooperar para el control de fronteras.
El jefe del Gobierno español agradeció la labor que realizan los presidentes de Chad, Níger o Libia para intentar frenar la emigración ilegal y se mostró satisfecho de que ahora la Unión Europea ya "interviene en serio y a fondo" en este asunto.