Los Mossos d'Esquadra han detenido a 16 personas de nacionalidad rumana de entre 20 y 36 años por presuntamente pertenecer a una organización criminal dedicada a cometer hurtos y robos violentos a personas de edad avanzada en la calle de varios municipios catalanes y del resto de España, y por los delitos de blanqueo de capitales, falsedad documental, usurpación del estado civil y tráfico de drogas.
Los hombres de la organización se encargaban de trasladar a las mujeres hasta puntos de la ciudad donde es habitual encontrar a personas mayores a primera hora de la mañana y les ofrecían favores sexuales o servicio doméstico como maniobra de distracción, tras lo que aprovechaban la confusión para robarles objetos personales como relojes, cadenas y joyas.
Cada equipo de trabajo podía obtener unos 1.000 euros al día y las ganancias anuales originadas a partir de estos ilícitos se situaban cerca de los 200.000 euros.
Además, los líderes de la organización gestionaban vehículos que ponían a nombre de testaferros para evitar que les identificaran o les relacionaran con los robos, y vendían el oro sustraído mediante una red de receptores.
La investigación ha permitido contrastar que uno de estos receptores compraba las joyas por el valor de su peso en oro y pagaba un precio por encima de mercado, con lo que conseguía blanquear dinero del tráfico de drogas.
INVESTIGACIÓN PARALELA
Una investigación paralela de la misma unidad ha destapado también una trama de blanqueo de capitales basada en el envío de dinero al extranjero, puesto que estas personas acumulaban antecedentes por los mismos hechos en Alemania, Bélgica, Francia y Holanda, además de tener una gran movilidad en toda España, ya que pasaban días --incluso semanas enteras-- en Valencia y Andalucía.
La primera fase de la investigación se saldó con siete entradas y cacheos a domicilios de Barcelona, Badalona y Santa Coloma de Gramenet (Barcelona), la recuperación de 21 relojes de diferentes valores, ocho vehículos, joyas, diamantes, básculas de precisión, documentos falsos que usaban para poner a nombre de los testaferros los vehículos y seguros, y 4.400 euros en efectivo además de un kilogramo de hachís.
De los 16 detenidos, 14 habían sido acumulaban más de un centenar de antecedentes y han ingresado en prisión por orden del Juzgado de Instrucción 5 de Barcelona, aunque la policía no descarta más detenciones en los próximos días o en una segunda fase de la investigación.