La Fiscalía ha pedido dos años de cárcel para dos porteros y el dueño de un bar de Sevilla por un delito de lesiones cometido contra un ciudadano al que golpearon hasta tirarlo al suelo, y luego le fracturaron un dedo tirando de él hacia atrás, lo que le ha dejado secuelas en la movilidad y cicatrices visibles.
Los acusados, de 40, 42 y 50 años, discutieron con la víctima sobre la una de la madrugada del 23 de diciembre de 2014 en un bar de la Alfalfa, una plaza situada en el centro de Sevilla, según el escrito de acusación de la Fiscalía, al que ha accedido Efe.
Tras la discusión se produjo la agresión, que provocó en el herido una fractura del dedo meñique, una de cuyas falanges quedó rota en varios trozos.
Las lesiones, que tardaron en curar 282 días, obligaron a dos intervenciones quirúrgicas que incluyeron la instalación de una placa de titanio atornillada, que luego se retiró para colocar otra placa con tres tornillos, así como un injerto con tejidos propios.
Tras las intervenciones y la rehabilitación, el agredido tiene varias cicatrices visibles y el dedo sin buena movilidad, por lo que la Fiscalía exige a los acusados una indemnización de 20.000 euros.
Una vez presentado el escrito de conclusiones provisionales de la Fiscalía, el juzgado de instrucción 10 de Sevilla ha decretado la apertura de juicio oral contra los dos porteros, Kliton R. y Benisk R., nacidos en Albania, y el dueño del bar, Alejandro D.G., de nacionalidad española.
