Las principales aerolíneas de EEUU, United Airlines, American Airlines y Delta, han decidido prohibir el transporte en sus aviones de trofeos de caza mayor, tras la polémica por la muerte del famoso león Cecil de Zimbabue a manos de un cazador estadounidense.
La primera en anunciar la medida fue Delta, con vuelos directos entre EEUU y Sudáfrica, que reveló la entrada en vigor de la prohibición de transportar trofeos de caza de grandes animales en un comunicado emitido el lunes.
"Con efecto inmediato, Delta prohíbe el transporte como carga de trofeos en todo el mundo de león, leopardo, elefante, rinoceronte y búfalo", explicó la compañía estadounidense.
Delta matizó que hasta ahora su política era la de aceptar sólo aquellos trofeos que cumpliesen "de forma estricta" con todas las regulaciones gubernamentales en relación a las especies protegidas, y adelantó que la "revisará" con respecto a otros trofeos de caza distintos a los de los animales mencionados.
Horas después del comunicado de Delta, las otras dos mayores aerolíneas de EEUU, United Airlines y American Airlines, también anunciaron prohibiciones en el transporte de trofeos de caza de los cinco animales citados.
La muerte del león Cecil a manos del estadounidense Walter James Palmer ha desatado una oleada de críticas en EEUU, internet y las redes sociales, mientras varios ciudadanos han acudido a protestar a la clínica del dentista residente en Minesota Palmer, que lleva cerrada varios días.
Además, el Servicio de Pesca y Vida Silvestre de los Estados Unidos ha abierto una investigación sobre el caso, al asegurar que "comparten" el interés de Zimbabue en la protección de las especies amenazadas y además investigan si la muerte del león pudo estar conectada con una red ilegal de tráfico de animales.
Según la Fuerza Especial para la Conservación de Zimbabue (ZCTF, en inglés), Palmer participó el pasado 6 de julio en una cacería nocturna en el Parque Nacional de Hwange, en el oeste del país.
El león Cecil, de 13 años de edad, fue atraído con una presa amarrada a un vehículo como cebo para abatirlo fuera del parque, de modo que técnicamente ya no sería ilegal cazarlo.
"Palmer disparó a Cecil con un arco y una flecha, pero este disparo no lo mató. Lo rastrearon hasta que lo volvieron a encontrar, 40 horas más tarde, y le volvieron a disparar con un arma", explicó el presidente de la ZCTF, Johnny Rodrigues.