La 71 asamblea anual de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) concluyó hoy en Miami con la convicción de que el futuro de la industria aérea necesita mejores infraestructuras y refuerzos en la seguridad.
La reunión, que durante dos días ha reunido a más de un millar de directivos de las principales compañías aéreas del mundo, sirvió también para debatir sobre el recargo que la compañía Lufthansa aplicará a los vuelos comprados fuera de su página web, decisión que afectará de forma directa a agencias de viajes y otros sistemas de distribución de billetes.
En relación con la seguridad aérea, el vicepresidente regional de IATA para América, Peter Cerdá, dijo hoy a Efe que "es importante aprender de los accidentes que se produjeron el año pasado" para crear nuevos protocolos de seguridad aérea.
La IATA debatió también sobre el desarrollo de las infraestructuras aeroportuarias y concluyó que este asunto es otro reto al que deberán "desafiar" las compañías "a corto y medio plazo".
"Hay aerolíneas que pueden crecer pero los aeropuertos y el espacio aéreo no están preparados para ese crecimiento importante que se está exigiendo en varias partes del mundo", comentó Cerdá.
En ese sentido, Andrés Conesa, presidente de Aeroméxico y miembro de la junta directiva de la IATA, declaró que hoy en día la región de América Latina "está a la vanguardia" de este proceso de expansión, aunque "claramente la infraestructura que hoy se tiene va a ser insuficiente en los siguientes años".
Por ello, Conesa manifestó que hay que buscar la fórmula para trabajar "entre las aerolíneas y los gobiernos para fortalecer esa infraestructura".
La edición número 71 de la asamblea general anual de la IATA -que reúne a unas 260 compañías aéreas- sirvió también como lugar de debate sobre la decisión de la compañía alemana Lufthansa de aplicar un recargo a los billetes adquiridos fuera de su página web.
En relación con este asunto, la compañía Air France-KLM aseguró que "está considerando cualquier desarrollo" en la distribución de venta de billetes, pero rechazó hacer comentarios sobre el recargo anunciado por Lufthansa.
En un comunicado hecho público durante la reunión, Air France-KLM subrayó que la venta de billetes a través de terceros mediante sistemas de distribución "es un asunto crucial" y supone un "coste sustancial" para la compañía.
"Los socios son clave en nuestro proceso de venta y para servir mejor a nuestros clientes", dice la nota de Air France-KLM.
En este sentido, Air France-KLM afirma que "está considerando cualquier desarrollo en este entorno, incluyendo el NDC", en alusión al programa impulsado por IATA que incluye los canales de venta tradicionales así como los sistemas de distribución global (GDS), como Amadeus y otros portales especializados.
El comunicado hecho público hoy por Air France-KLM se produce después de que el consejero delegado de la compañía, Alexandre de Juniac, reconociera el lunes a los medios de comunicación que su empresa "evalua" la opción de aplicar el mismo recargo anunciado por Luftansa.
No obstante, Alexandre de Juniac subrayó también que Air France-KLM tiene todavía dos años de contrato con Amadeus, algo que puede dificultar la operación desde un punto de vista legal y financiero.
En el transcurso de la asamblea, los directivos de IATA presentaron también la maleta "ideal" para servir como equipaje de mano dentro de los aviones, con un tamaño de 55 centímetros de alto, 35 centímetros de ancho y 20 centímetros de profundidad.
La organización confía en que a finales de año este tipo de maletas estén disponibles en el mercado, con un sello que indique que cuenta con la aprobación de IATA como equipaje de mano.
Durante la celebración de esta asamblea anual, la aerolínea española Vueling, con sede en El Prat de Llobregat (Barcelona), firmó su adhesión a la IATA.
Esta operación, según fuentes de la compañía, permitirá a Vueling "reducir sus costes en las transacciones que realice con el resto de aerolíneas".
