Un total de 36 personas fallecieron y otras 47 resultaron heridas, 13 de ellas de gravedad, como resultado de una avalancha humana en una fiesta de Año Nuevo en el centro de Shanghái (China), informó hoy el Gobierno local.
El incidente sucedió en la plaza de Chen Yi, situada cerca del malecón fluvial conocido como el Bund, en el corazón histórico de Shanghái, a orillas del río Huangpu, poco antes de la entrada en 2015, alrededor de las 23.30 hora local del miércoles (16.30 GMT).
Esta zona es uno de los espacios más emblemáticos de la capital económica de China, con vistas a los rascacielos del Lujiazui, el barrio financiero, y uno de los escenarios habituales de las celebraciones de Año Nuevo en la ciudad.
De los 36 fallecidos, de edades entre 16 y 36 años, 25 eran mujeres, la mayoría veinteañeras, y los 11 restantes, hombres, afirmaron fuentes médicas a la agencia estatal Xinhua.
Los 47 heridos, también jóvenes en su mayoría, fueron trasladados a varios hospitales de la ciudad y a las 11.00 hora local (04.00 GMT) 40 seguían ingresados, 13 de ellos en estado grave, según el diario oficial Shanghai Daily.
Mientras los habitantes de la urbe se concentraban hoy en el lugar de los hechos para recordar a las víctimas, la policía china comenzó a investigar las causas de este suceso que tiñó de tragedia lo que iba a ser una fiesta.
Según los primeros testimonios de los supervivientes divulgados por la prensa china, la avalancha se originó en las escaleras de una plataforma elevada adyacente a la plaza, junto al río, donde se aglomeró gran cantidad de personas, y debió estar relacionada con el lanzamiento de unos cupones desde edificios aledaños.
Testigos que estuvieron en la fiesta relataron al Shanghai Daily que la avalancha se formó cuando se bloqueó el acceso a las escaleras en los alrededores de la ribera del Huangpu a un gran grupo de gente, que cayó al suelo y formó una montonera.
Además, otros testigos dijeron a la agencia Xinhua que desde las ventanas de edificios cercanos se estaban lanzando cupones que parecían billetes de dólar, que llevaban impreso el nombre de un bar de la zona, y que la gente que se encontraba en la zona empezó a pelearse por conseguirlos.
Algunos supervivientes definieron las escenas que se vivieron en los instantes posteriores a la estampida humana como "infernales y horrorosas", según Xinhua.
"Los escalones que suben a la plataforma estaban llenos de gente. Algunos querían bajar y otros querían subir", detalló una superviviente identificada como Yin a la agencia oficial.
"Nos quedamos atrapados en medio y vimos a algunas chicas caer mientras gritaban. A continuación la gente empezó a caer", añadió la superviviente, cuyo hijo de 12 años acabó también en el suelo y con la ropa cubierta de huellas de pisadas.
Otro asistente a la fiesta, identificado como Zong, contó al Shanghai Daily que, cuando estaba cerca de la plaza, una "masa enorme" de personas le empujó.
"No queríamos movernos hacia el área de la ribera del río, pero no tuvimos opción. De repente una masa que estaba enfrente de nosotros empezó a empujarnos hacia atrás. Caímos y estábamos enterrados en medio de capas de gente", agregó este testigo.
El Bund es uno de los dos principales lugares de encuentro para celebrar el cambio de año en Shanghái -la otra es la conocida como Times Square de la urbe china, situada en la avenida comercial de Huaihai Lu-.
El año pasado alrededor de 300.000 personas asistieron a la fiesta del Bund, una cantidad que sobrepasó las previsiones de las autoridades locales y provocó un caos de tráfico.
Para este año, estaba previsto limitar el acceso a la zona de las celebraciones y, según el diario oficial, iban a ser invitadas unas 2.000 personas.
El presidente chino, Xi Jinping, pidió hoy una investigación inmediata de lo sucedido en la fiesta de Año Nuevo de Shanghái y subrayó la importancia de prevenir que accidentes de ese tipo vuelvan a ocurrir, en declaraciones recogidas por Xinhua.
Como reacción a este suceso, el Gobierno de Shanghái suspendió hoy todas las celebraciones de Año Nuevo en la ciudad.
Asimismo, varias decenas de personas se concentraron en el lugar donde ocurrió la avalancha durante las primeras horas de la jornada y realizaron ofrendas florales para recordar a los fallecidos.