Otra estadística negativa más que sumar. Y van varias. Demasiadas. La entidad Sadiel Desarrollo de Sistemas (SDS), una de las innumerables empresas que llegó a la Bahía gaditana amparada con el halo mágico del Plan Bahía Competitiva -impulsado por la Junta de Andalucía tras el cierre de Delphi-, entregó el finiquito a 55 de sus 74 trabajadores.
Algo previsible viendo las maniobras realizadas en las últimas fechas. Los 19 restantes empezarán a trabajar a primeros de diciembre en la planta que Ayesa, la matriz de SDS, tiene en Sevilla. Los 55 trabajadores que se suman a la ya larga cola del paro son jóvenes, menores de 35 años y con estudios de alta cualificación, la gran mayoría en Ingeniería Informática, a los que apenas se les pagaba 1.000 euros mensuales.
Hay que recordar que la Junta de Andalucía vendió la mitad de sus acciones a Ayesa en 2011, firmando así su sentencia de muerte. Tal y como ha venido sucediendo con otras entidades atraídas al son de subvenciones públicas a la Bahía, después de haberse comido los 400.000 euros del Plan Bahía Competitiva, SDS, ahora, cierra las puertas de la planta de El Puerto. Así, tal cual. Eso sí, en su afán en continuar con la formación de los parados, -la Junta muy dada a los cursos de formación-, éstos acudirán a una empresa de Orientación Laboral durante seis meses. Algo es algo.
La Junta de Andalucía por su parte también ha tenido “el detalle” de pedir al comité los currículum de todos los afectados para que estos puedan entrar en el proceso de selección de una empresa asentada en Málaga.
Según el vicepresidente del comité de empresa, Antonio Dionisio Vázquez, no se cansa en repetir que la planta de El Puerto es viable técnica y económicamente “pero la dirección la ha dejado morir porque deslocalizando el trabajo hacia Latinoamérica saca más rentabilidad porque los sueldos allí son mucho más bajos”. Para más inri, “y lo peor es que la Junta de Andalucía promueve esta fuga de empresas a través de la Agencia Extenda, que se dedica a fomentar la externalización de las empresas andaluzas”.
Precisamente, hoy a las 12.00 horas los exconsejeros de Innovación de la Junta de Andalucía Martín Soler y Antonio Ávila han sido citados a declarar en calidad de testigos ante el Juzgado de Instrucción número 4 de Cádiz, que instruye el ‘caso Bahía Competitiva’ sobre un presunto fraude millonario en las ayudas del Plan Bahía Competitiva.
El ‘caso Bahía Competitiva’ investiga el presunto fraude millonario cometido con las ayudas a la reindustrialización de la Bahía de Cádiz a través del plan que ha dado nombre al procedimiento. Un total de 31 personas han sido detenidas en distintas fases de la investigación.
Se trata de una supuesta trama en la que, según resumía la Policía al darla por desarticulada, medio centenar de empresas solicitaban ayudas, responsables y funcionarios de la Diputación gaditana y del Ministerio de Industria presuntamente facilitaban la concesión, y expertos desviaban los fondos a paraísos fiscales para defraudar a la Hacienda Pública.
Lo único claro después de Delphi, y tras venderse las bondades con ésta, es que 55 trabajadores van a la calle.
