—Conil CF— Carrasco, Samuel, Lucia, Joaqui, Pablo Acedo, Narváez (Garrido 89'), Crespo, Raúl Silveira, Raúl, Fran Ponce (Juan Ureba 68') y Mario (Alberto Ramírez 60').
—Arcos CF— Ismael, Ángel, Casillas, Chato, Adri, Ati (Borja 46'), Zurdito, Borja Guerrero (Iván Jiménez 50'), Dani Zúñiga (Rafi Cruz 46'), Heredia y Jordi.
Goles: 0-1Heredia, 10´; 1-1 Joaqui, 21'; 2-1 Alberto Ramírez, 78'.
Árbitro: García Moreno (Sevilla). Amonestó por los locales a Raúl Silveira, Narváez, Joaqui, Crespo, Fran Ponce, Sanchís y, por el Arcos, a Iván Jiménez. Expulsó al arcense Rafi Cruz por doble amarilla (86´).
Incidencias: Unos 300 espectadores en el Pérez Ureba, de césped artificial.
El Arcos sigue agarrado a la derrota pese a adelantarse en el marcador en el partido frente al Conil. Al menos ya sabe lo que es mandar en un partido en este infausto inicio de liga, en el que aún no ha estrenado su casillero de puntos. Hasta se pudo poner con 0-2 a favor si nada más comenzar el encuentro el defensor local Joaqui hubiese acertado con su propia portería en un mal despeje, pero el balón dio en el travesaño en vez de colarse en la meta local.
Fue una prueba de lo enchufado que salía el equipo de Keko Rosano, que introdujo varias novedades en el once titular, apostando por la pareja de centrales formada por Casillas -el mejor del Arcos junto con el portero Ismael- y Chato, el debut del lateral izquierdo Adri, la inclusión de Ati en el doble pivote acompañando a Zurdito y el regreso al once de Heredia.
El equipo le metió miedo al Conil hasta que los de Sanchís marcaron el gol del empate, en un balón perdido en área arcense que se encargó de incrustar en la red el defensa Joaqui, totalmente desmarcado.
Antes de eso, el equipo amarillo ya había avisado varias veces por medio de Mawi, Crespo y Raúl Silveira -el mejor de los locales-, pero un inspirado Ismael se interponía entre los deseos de marcar de los rápidos y escurridizos delanteros conileños y su propia portería. El Arcos perdió pronto la iniciativa en el juego y se vio desbordado en más de una ocasión por la tripleta atacante local, que aprovechaba su velocidad para ganar la espalda a la defensa arcense, que no podía hacer otra cosa que achicar balones y meter el pie en el último momento para evitar lo inevitable, tarea en la que destacaba el repescado Casillas. Después del gol de Heredia y de algunas jugadas a balón parado en la que los arcenses pudieron sacar algo más de provecho, el Arcos desapareció del campo. Ni Zúñiga ni Ati ni Zurdito podían con el centro del campo rival, comandado por un extraordinario Raúl Silveira y un acertado Mario, que marcaban los tiempos de su equipo y lo dirigían de forma magistral.
El propio Silveira pudo marcar en un tiro envenenado a la escuadra izquierda de la meta del Arcos que rozó el larguero y se marchó fuera para alivio de los nuestros.
En el descanso volvió a verse algo que se empieza a repetir en el Arcos: Keko dejaba en la caseta a Zúñiga -segundo partido consecutivo que lo saca del campo- y a Ati, pero el rumbo del partido apenas varió a mejor. El equipo se aculaba atrás y cada minuto que pasaba se hacía más insistente el dominio del Conil. A pesar de ello, aún le quedaban fuerzas a los visitantes para intentar una internada de Rafi Cruz por la banda derecha, que culminó el extremo arcense con un pase de gol a Jordi, fallando este en el remate. Fue la mejor oportunidad arcense, la mejor jugada de los blancos y su canto del cisne. Antes, Ismael había sacado con el pie derecho un balón que se colaba a disparo de un incisivo Mawi. Pero el segundo gol local no tardaría en entrar de nuevo en la portería de Ismael, en un error encadenado de la defensa del Arcos, que dejó que el recién entrado Alberto Ramírez se metiera hasta la cocina y rematara a gol el tímido rechace en corto de Ismael a su propio disparo.
Pese a que quedaba aún suficiente tiempo para reaccionar, no se veía en el Arcos capacidad para empatar el partido, a pesar de la entrada en el campo de Iván Jiménez 'Maqui', otro debutante en las filas arcenses, que apenas pudo entrar en juego y demostrar su peligrosidad ante la puerta rival. Para más desazón, Rafi Cruz veía la amarilla dos veces seguidas y dejaba al equipo con diez.
Otro expulsado, tras lo de Raúl López contra el Gerena, algo que se está convirtiendo en norma y que debilita aún más si cabe a un equipo que necesita del concurso de todos y cada uno de sus jugadores, aunque la mayoría de ellos no haya dado aún la medida real de sus posibilidades. Pese a la voluntad que pusieron los visitantes por intentar el empate, más cerca estuvo el Conil de anotar el tercero que el Arcos de igualar, en un tiro de Ureba que se fue al poste derecho del portal de Ismael.
Tras cuatro jornadas sin puntuar, la situación del Arcos empieza a mostrarse preocupante. Los puntos se hacen de rogar y el farolillo rojo cada vez quema más.