Según ha recordado COAG en un comunicado, el cultivo del aguacate había supuesto "un respiro" para los agricultores del Campo de Gibraltar, ya que éste se había adaptado a las condiciones agronómicas y climáticas de la zona, ofreciendo una elevada producción a un bajo coste. Pero el frío polar de los últimos días, ha provocado la helada de las yemas con la consiguiente pérdida de producción para la presente campaña y en algunas situaciones las pérdida total del cultivo.
Concretamente, para los cultivos subtropicales estas heladas han sido tan severas que incluso las explotaciones donde se han implantado medidas preventivas --que han implicado una "fuerte" inversión tales como molinos eólicos, infraestructuras de riegos por aspersión y otras puntuales como la quema de restos vegetales-- no han impedido los efectos adversos de estas heladas.
Esta situación agrava, según COAG, el "difícil momento" por el que pasa este tipo de cultivo ya que arrastran las secuelas de las heladas que tuvieron lugar en campañas pasadas.
Por otra parte, el cultivo tradicional de toda la comarca (cítricos) también se ha visto "seriamente perjudicado" debido a que las bajas temperaturas han provocado que las yemas y los brotes, que se traducirían en una futura producción y masa foliar, se hayan helado.
Asimismo, la fruta pendiente de recolección se ha visto dañada y, por tanto, depreciada para el mercado y para la industria transformadora.
El secretario provincial de la organización agraria, Miguel Pérez, ha explicado que se va a valorar la superficie afectada, así como los daños en las producciones, para que "aun conociendo la difícil situación económica", se haga un "esfuerzo" para que los profesionales del campo puedan paliar las pérdidas de esta campaña a través de ayudas directas para replantar los cultivos afectados o indirectas tales como rebajas fiscales, reducciones de canon o tarifas de riego y exenciones impositivas.
Desde COAG-Cádiz agradecen la "intensa" labor realizada desde el comienzo de las heladas y de forma "continua e ininterrumpida" por los profesionales de la Agencia Andaluza del Agua y de la delegación provincial de Medio Ambiente, ya que con su trabajo "han permitido que puedan ponerse en marcha medidas preventivas".
